Sam Bennett: “No soy el sprinter más rápido, pero se necesita más que eso”
Por @FXavierVidela
Sam Bennett (Deceuninck-Quick Step) ganó en 2020 el sprint que todos quieren llevarse, el de los Campos Elíseos, en la última etapa del Tour de Francia. El irlandés también se impuso en la clasificación por puntos de la ‘Grande Bouclé’ pero, aún así, cree no ser el mejor velocista del mundo.
“Creo que soy duro conmigo mismo: cuando veo un error o un problema, no me alejo de él, me gusta reconocerlo, aprender de él, mejorarlo y tratar de seguir adelante”, dijo Bennett, en diálogo con Cyclingnews. Es que ‘tardó’ hasta la 10° etapa en el Tour para alzar los brazos, éxito que luego repetiría en la jornada final.
“A veces lo que pasa es que la gente puede tomar mi honestidad por debilidad, pero yo soy sincero: todavía voy a salir y voy a dar el 110% al día siguiente. Creo que soy realmente honesto, pero también bastante terco”, continuó Sam, abierto a ofrecer declaraciones distintas.
“Siempre pensé que en el Tour la gente juzga si eres un velocista de élite o no, pero gané el maillot verde y sigo sintiendo lo mismo, ¿sabes? Así que no lo sé, no sé si soy el mejor sprinter del mundo o no”, continuó el irlandés de 30 años, quien cree no ser el más veloz.
“Hay muchos tipos rápidos y probablemente no soy el más rápido, pero al final del día solo tengo que llegar a la línea primero. Se necesita mucho más que eso para poder ser fuerte al final, como tácticas y posicionamiento para poder ir al sprint. Pero no sé si soy el mejor o no, aunque siempre esté allí”, mencionó ‘Samy’, quien ha cambiado su manera de encarar los embalajes masivos.
Antiguamente, en el Bora-hansgrohe se limitaba a seguir ruedas, situación que se modificó en su llegada al Deceuninck-Quick Step. “Antes, le pedía a mis compañeros que me llevaran hasta la flamme rouge y me pusieran a rueda de cierto corredor, y yo luchaba muy duro. Esa persona era un punto de referencia. Ahora, yo lo soy. La gente busca nuestra rueda. Eso fue un gran cambio para mí”, opinó Bennett, quien también se llevó un parcial en la Vuelta a España en 2020.
Para la campaña entrante, el Tour de France volverá a ocupar la posición más importante dentro de su programa. Una victoria de etapa volverá a ser su objetivo, mientras que analizará luchar por el maillot verde durante el transcurso de la competencia. ¿Y el resto? Milán-San Remo parece ser su otra gran meta, al igual que la Gent-Wevelgem.
“Parece que nunca he alcanzado la mejor forma para Milán-San Remo, siempre llegué justo debajo de donde tenía que estar, así que llegar allí sería genial. En los últimos años me he acercado a estar en la definición, pero no fui lo suficientemente fuerte. Si estuviera en mi mejor momento podría superar el Poggio bastante bien. No atacando con los muchachos, pero sí estando en el grupo”, finalizó Bennett, ilusionado con poder ser protagonista en la próxima edición de ‘La Classicissima’
Franco Xavier Videla¿Te gusta lo que hacemos? Seguínos en Instagram y TwitterSumate en facebook: Ciclismo Internacional
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Muy bueno Sam, pero la época en que un sprinter puro ganaba la MSR ya no volverá, salvo que quiten el Poggio…
Con 9 etapas por decidir al sprint en el tour, todos los sprinters estarán en la salida, sin importar la afectación a compañeros (Gaviria a Pogacar) o a sus intereses particulares (Viviani en los JJOO)..
Como lo dice Sam, disputar la verde le resta opciones de ganar etapas, por eso este año será para Sagan y ojalá en la repartición de parciales, Gaviria logre más de una…
si Ackermann como parece ser, va a ir al Tour, estando en el mismo equipo que Sagan resultará curioso verlos sprintar el uno contra el otro