Opinión: Evenepoel, una responsabilidad más allá de las Grandes Vueltas

Por @amatiz12

Remco Evenepoel volvió a “salvar” la primavera de Quick-Step con su victoria en Lieja-Bastoña-Lieja. Pero viendo que esa puede convertirse en la constante en el corto plazo, se antoja realista pensar que las responsabilidades del belga irán más allá de las Grandes Vueltas.

Por historia y esencia, el ‘Wolfpack’ siempre está en la obligación de lucirse en esta época del año y que tengan que conformarse con conquistar La Decana mientras pasan en el anonimato en el resto de pruebas, es lamentable. A título personal, un día -supremamente importante- no compensa decenas de jornadas discretas y borrados del radar.

Y dicha situación se ha dado por diversos motivos en los que es bueno adentrarse brevemente. Lo principal es que la estructura no ha despertado del letargo y se ha apegado a veteranos que en su momento tuvieron brillo, pero que justamente ya son protagonistas del pasado, no del presente. Han dejado pasar el tren y hoy por hoy, no cuentan con un relevo generacional para los Lampaert, Asgreen o Alaphilippe.

En algún momento Lefevere admitió que por ejemplo, pudo haber fichado a Van Aert, pero al final no logró concretar nada. Fuera de eso, las figuras actuales tienen contratos vigentes y duraderos con sus respectivas escuadras y tampoco se conoce un interés de fichar a corredores de presente o futuro. Para caso, Laporte va a renovar con Jumbo, que está fuertemente interesado en Matteo Jorgenson, una de las revelaciones de esta campaña de clásicas.

Siempre se puede pensar en recuperar a Julian Alaphilippe, pero francamente los caminos apuntan en dirección opuesta. En declive desde hace un par de años, con una tensa relación con su jefe que no titubea al enviarle pujas en público, o bien no retoma sus piernas de antaño o si quiera extenderá su vínculo, que expira en 2024.

Por todo lo expuesto, por ese claro bache que existe en el bloque de clásicas no es descabellado pensar en que a Evenepoel lo pueden enviar a cubrir ese hueco. Los números así lo respaldan. Varias citas entre los diez primeros, un par de Ballerini -buen corredor, con margen, pero sin desplegar resultados top- y otras más decepcionantes como el 23º en Paris-Roubaix o el 14º en Gent-Wevelgem. El único rendimiento destacable fue justamente el de Remco en Lieja, única victoria y podio en el calendario en cuestión.

Ahora bien, en términos deportivos tiene sus pros y contras. Físicamente, el campeón del mundo tiene las cualidades para brillar en escenarios como Flandes, pues tiene esa explosividad idónea en el tipo de esfuerzos que componen a esas citas del género. En el apartado técnico sí existen unas dudas.

Sí, en el pavés se requiere de una destreza y manejo de la bicicleta, lo cual no es propiamente la fortaleza de nuestro protagonista, que de hecho ha sufrido con esas habilidades producto de su brutal caída en Lombardía en 2020. No obstante también debe reconocerse que a estas alturas no es ese mismo corredor inseguro de 2021 que pasaba un calvario en el sterrato del Giro o en las bajadas más técnicas. Ha mejorado. No es el mejor, aún comete errores -incluso en esta misma Lieja- pero su agilidad es decente.

Cierto es que eso lo expone a un riesgo de caída, algo que especialmente se quiere evitar el año entrante, que es donde está presupuestado su debut en el Tour. Ahí es donde deben resolver el dilema, no de escoger entre una u otra, sino de ver cómo balancear las escalas para que Evenepoel maquille la primavera del equipo sin arriesgar su máximo objetivo.

Hoy por hoy, la joya de Aalst es la única alternativa para que la manada de lobos medianamente regrese a sus fueros en su terreno de predilección. Y el intento vale la pena, porque él tiene el nivel de base para brillar ahí y cuenta con un margen para mejorar su audacia técnica, pese a que estas alturas presenta una clara evolución.

Históricamente han sido dominadores de un área prestigiosa del ciclismo y hasta que no dominen otra -como pretenden con las rondas de tres semanas-, seguirán teniendo obligaciones en donde han sido reyes indiscutibles. Y para resolver la crisis que sufren en carreras de un día, irónicamente su mejor opción es ese hombre que les abrió el horizonte de las generales en vueltas por etapas, algo que hace poco iba en contravía de los ideales de Quick-Step.

Alejandro Matiz¿Te gusta lo que hacemos? Seguínos en Instagram y TwitterSumate en facebook: Ciclismo Internacional

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