El agresor de Van der Poel explicó por qué lo hizo
Tras el hecho repudiable, habló por primera vez a la prensa. El agresor de Van der Poel explicó por qué lo hizo
El agresor de Van der Poel explicó por qué lo hizo
Tras el hecho repudiable, habló por primera vez a la prensa. El agresor de Van der Poel explicó por qué lo hizo
Un día después de entregarse a la policía, el presunto fanático –léase el presunto, porque un fanático del deporte no haría algo de esta índole- explicó lo que lo llevó a tirar una caramañola a la cara de Mathieu van der Poel mientras este iba en fuga a poco menos de 30 kilómetros del final en París-Roubaix.
Extra slowmotion from Sporza of a “fan” throwing a bidon into MVDP’s face. #ParisRoubaix pic.twitter.com/cgnNnLx4PH
— Lukáš Ronald Lukács (@lucasaganronald) April 13, 2025
En una entrevista con HLN, el culpable –cuya identidad permanece reservada- respondió a través de su abogado Peter Desmet. Entre otros aspectos, señala que le mandó una carta a Van der Poel y Alpecin disculpándose por el hecho.
Su disculpa
“Por supuesto, mi primera y principal intención era disculparme personalmente con Mathieu van der Poel. Me alegro muchísimo de que, a pesar de mi estupidez, haya logrado cruzar la meta primero el domingo. Pero al mismo tiempo, me doy cuenta de que debo disculparme con todos los ciclistas y aficionados al ciclismo.
Paradójicamente, el hombre –de origen belga- pocos instantes después del hecho, negó lo que hizo a quienes estaban en el lugar. Pero finalmente tuvo que admitirlo y terminó entregándose esa misma noche.
Estaba alcoholizado
El hombre argumentó que su acción idiota tiene origen en su estado de ebriedad en esos instantes. Llegamos sobre las 11 de la mañana. Nos tomamos unas copas en la carpa cercana mientras esperábamos a que los ciclistas pasaran por la zona donde estábamos”, recuerda, admitiendo que la cantidad de bebida consumida le había nublado considerablemente el juicio. “Y sí, tengo que admitir que bebí bastante”.
La caramañola que tiró era del Visma, algo que claramente se ve en las imágenes. Pero afirmó que no es fanático ni del equipo ni de Wout van Aert. En el césped, entre la tienda y el camino adoquinado, vi una lata amarilla tirada allí. Probablemente la había tirado antes uno de los ciclistas de la carrera junior o sub-23”. Agregó tras lo cual: “Sin pensarlo mucho, lo recogí. No estaba del todo lleno, pero aún quedaba algo de líquido dentro”.
No era fan de ningún ciclista
“Mathieu van der Poel se acercó y, al pasar, tomé la estúpida decisión de tirar la botella. ¿Por qué lo hice? Me lo he estado preguntando una y otra vez, y sigo sin tener respuesta. Fue un impulso terriblemente tonto. No puedo explicarlo de otra manera. ¿Era un fan de Wout van Aert intentando sabotear a su rival? Para nada; ni siquiera tengo un corredor favorito. Me sentí fatal en cuanto lo golpeó. En menos de medio segundo ya me arrepentí de lo que había hecho. Por un lado, me sentí aliviado de que no se estrellara. Pero ¿por qué lo hice? ¿Cómo pude ser tan estúpido? ¿Qué me va a pasar ahora?”.
Y sigue mostrándose arrepentido. “Ese segundo estúpido me ha metido en medio de una enorme tormenta mediática. Siento que todo el mundo habla de mí. Sé que me equivoqué y asumiré la responsabilidad, pero espero de verdad que la situación se calme pronto”, concluyó el tirador de botellas. Su abogado indicó que el individuo “asumirá la responsabilidad legal” pero que esperan resolver el asunto en privado. De todas formas, aclararon que aceptarán “las consecuencias que se deriven”, más allá de que puede haber complicaciones legales dado que el incidente ocurrió en Francia, pero Van der Poel, su equipo y el acusado residen en Bélgica.
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H.P.! Que se haya entregado, que haya confesado, y que se haya disculpado, no lo exime. Ojalá que el equipo de MVDP lo acuse de intento de agresión y que ese H.P. pague con cárcel, aunque sea poco tiempo, pero que pague por lo que hizo. Eso sentará un precedente para los trogloditas H.P. que piensen algún día hacer lo mismo.
Siempre que un delincuente es arrestado pide perdón por lo que hizo y dice que está muy avergonzado, si no lo hubieran señalado y atrapado estaría como si nada hubiera pasado sin preguntarse porqué lo hizo y sin ningún indicio de arrepentimiento. Eso de que estaba ebrio es una mera disculpa, algo que él se inventó para tratar de justificar su mal comportamiento.
Hay que tener en cuenta que los ciclistas son seres llenos de aspiraciones y se preparan para ganar y brindar espectáculo para que un irresponsable de un momento a otro atente contra la integridad física de ellos y tire al traste tanto trabajo y dedicación.
Al autor de este acto vandálico le deben aplicar una pena ejemplar para que los que esperan hacer lo mismo se den cuenta de lo que se les espera si lo hacen; que no valgan las disculpas que era que estaba borracho y que borracho no vale.