Por @amatiz12
Las últimas dos versiones de la Amstel Gold Race han suscitado grandes polémicas por las formas en que se han anunciado a sus vencedores. Para evitar otro chasco en 2023, la organización trabajará con otra empresa experimentada que garantice una resolución limpia.
En 2021, Wout van Aert fue proclamado campeón dudosamente con una foto en la que tenía más pinta de que Tom Pidcock había imperado. El curso pasado anunciaron prematuramente a Benoit Cosnefroy como ganador, pero luego tuvieron que rectificar al ver que en verdad Michal Kwiatkowski había arribado primero. Los dos son hechos bochornosos que no son propios de una prueba semejante calibre.
“Actualmente estamos trabajando con la empresa que juzga quién gana y quién pierde en el Tour de Francia, porque no quiero cualquier duda”, confirmó el director de la carrera en referencia a Matsport, que trabajó con la ronda gala hasta 2016 e ingresará como sustituta de Tissot en la que es la primera de tres citas del tríptico de las Ardenas.
Pero no todo se reduce a tener un mejor sistema, también encierra a la misma organización que debe ser más oportuna y menos apresurada para comunicar los resultados. “En casos similares, el jurado ya no declarará un ganador hasta que esté 100% seguro y la televisión estará fuera de la máquina de juzgar por un tiempo. No podemos dar el nombre equivocado”, agregó el director.
Alejandro Matiz
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