Bob Jungels quiere probarse en los adoquines sin descuidar las grandes vueltas

Por @pmpalermo

La planta de Bob Jungels invita a pensar en un ciclista para las clásicas. Y es que, con 1.89 m y 72 kg, sería lógico que esa fuera su especialidad, tal como apuntaba en sus años juveniles o cuando se impuso en la París-Roubaix Sub 23.

No obstante ello, su derrotero profesional lo llevó a enfocarse en las vueltas por etapas, logrando dos top 10 en el Giro de Italia y un notable 11° puesto en el Tour de France. Resultados imponentes que podrían repetirse, puesto que en 2019 regresará a la Corsa Rosa.

Aún así, con 26 años, Jungels todavía explora sus opciones. Es por ello que medita darle una oportunidad a las clásicas adoquinadas, algo de lo que le ha convencido uno de sus directores -y otrora clasicómano-Tom Steels.

En un equipo perfecto para acometer tal empresa, el luxemburgués tendría decidido ser de la partida en Dwars door Vlaanderen y Paris-Roubaix. “Luego de mi buen rendimiento en las Ardenas durante 2018, es casi obvio que quiero darle más importancia a las carreras de un día”, dijo a Cyclingnews el campeón de la Lieja-Bastoña-Lieja.

La cuestión es que su calendario 2019 ya está diseñado y no será este el curso en el que acometerá sus nuevos objetos de deseo. “Arrancaré en Colombia, luego iré a Omloop Het Nieuwsblad, Kuurne-Brussel-Kuurne, Paris-Nice, De Panne, E3-Harelbeke, Dwars door Vlaanderen y Tour de Flandes. Obviamente, defenderá su corona en Lieja.

“No he perdido ambiciones como vueltómano, pero descubrí que hay muchas otras competencias además de las Grandes Vueltas y, por caso, Geraint Thomas es una inspiración”, señaló. “Un hombre capaz de ganar E3, pelear por Roubaix y luego llevarse el Tour”, siguió.

“Creo que debería intentarlo el año próximo, corriendo mucho menos para llegar con piernas. Si no sale, siempre puedo regresar al programa habitual”, cerró Jungels.

Pablo Martín Palermo

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