Campeón del Mundo, Campeón de Flandes y Campeón en París Roubaix; MATHIEU VAN DER POEL
Por @Nandodimaria
El campeón del mundo y campeón del Tour de Flandes, se corona campeón de la Paris Roubaix. Mathieu van der Poel hace honor a su favoritismo y gana a su estilo, atacando de lejos y haciéndose inalcanzable.
El infierno del norte en su edición 121 tenía todo preparado para los amantes de las piedras, la carrera reina por excelencia con tramos de pavé tomó la partida en Compiègne y se recorrerían los 259,7 kilómetros pactados para llegar al embalaje final en el velódromo de Roubaix.
La carrera inició puntual y quien no faltó a la cita fue Dries de Bondt del Decathlon AG2R La Mondiale Team, quien lanzó el primer ataque apenas recorridos 1000 metros del trazado, posteriormente muchos ataques se presentaron buscando la fuga, Hagenes, Tiller, Asgreen, Haller, Slock, Syritsa y Malecki, lograron tomar una ventaja del grupo de favoritos.
Una caída fuerte se presentó en el recorrido y dejó fuera a un par de corredores, Elia Viviani (INEOS Grenadiers) y Jonas Rutsch (EF Education – EasyPost) tuvieron que abandonar la carrera por esa razón. Mas adelante fue Jonathan Milan (Lidl – Trek) quien tendría que bajarse de la bicicleta por un incidente con una moto.
El ritmo fue muy elevado y poco a poco se iban quedando sin opciones la mayoría de los corredores que integraban el lote principal, Alpecin se encargó de llevar una velocidad en franco aumento y poco a poco fue cayendo la ventaja de la fuga hasta quedar reducida aún a falta de más de 100 kilómetros.
El lote de favoritos llegó a la famosa ‘chicane’ previa al Bosque de Arenberg, quizá sea punto de vista de quien escribe, sin embargo pareció poco útil y sirvió simplemente para que los que iban en el frente tomaran una mejor posición sobre los demás, allí se empezó a decantar aún más el grupo de punta.
Saliendo de Arenberg hubo pinchazos de tres corredores importantes, Degenkolb, Pedersen y Philipsen tuvieron que cambiar de rueda o de bicicleta, había nerviosismo y se venía la parte crucial, en donde todo se definiría.
A 59 kilómetros de meta, en el sector 12 de pavé, el archifavorito Mathieu van der Poel lanzó uno de sus clásicos ataques, seco, fuerte e incontestable, los demás se miraron las caras mientras el neerlandés parecía levitar sobre las piedras mientras abría hueco.
De ahí en adelante fue un concierto en solitario del neerlandés, enfundado en su ‘frac arcobaleno’, se batió como un purasangre frisón y avanzó avasallante, con una calma premurosa que deleitaba el ojo del espectador, no había cómo derrotar al nacido en Kapellen.
Atrás, muy atrás, Pedersen, Politt, Pithie y Küng intentaban recortar la brecha, contando con la compañía de Philipsen, quien no tenía que trabajar pues el líder de su equipo iba camino a convertirse en el bicampeón del infierno del norte.
Pithie tuvo mala fortuna y se fue al piso en una curva, quedaron cuatro corredores siguiendo la estela de van der Poel, ellos seguirían juntos hasta Roubaix para disputarse el segundo y tercer lugar de la carrera francesa.
Mathieu van der Poel entró en solitario al velódromo de André-Pétrieux de Roubaix, ya había celebrado con su director deportivo junto al carro acompañante. No se lo podía creer, tenía más de tres minutos sobre su más cercano rival, situación que le permitió tomar con calma la vuelta de la victoria. Alzó los brazos en la meta y consiguió alzarse nuevamente con el adoquín, esta vez vestido de arcoíris.
Al sprint se definió el segundo y tercer lugar, llegaron Politt, Pedersen y Philipsen para disputarlo y la lógica primó, Politt, con menor punta de velocidad que sus rivales lo intentó de lejos, a su rueda se fue Pedersen sin cederle espacio. Philipsen los vió desde atrás y con su punta de velocidad los pasó en los metros finales para completar el 1 -2 para el Alpecin – Deceuninck.
Mads Pedersen del Lidl – Trek, completó el podio del infierno del norte, que nos dejó una nueva exhibición de Mathieu van der Poel, que parece no tener rival en las clásicas si no están presentes Van Aert o Pogacar.
Resultados:
Fernando Estupiñán
¿Te gusta lo que hacemos? síguenos en @CiclismoInter
Súmate en Facebook: Ciclismo Internacional
Copyright © 2012-2024 Ciclismo Internacional. All Rights Reserved
Mathieu van der Poel, llena de tinta los diarios y redes sociales, debido a sus actuaciones descomunales con ataques lejanos a más de 55 km, demarrando fortaleza, potencia y resistencia propias de un androide, hoy se pondera y se pone como un ícono de este deporte en este tipo de carreras, esperamos que en unos lustros no se derrumbe estos héroes, porque en este deporte se han construido y edificado; para luego enterarnos de que se valieron para obtener tan rotundos éxitos, solo por citar algunos casos:Valverde, Contador, Lance, Fromme, Chiapucci, Rominger, Basso, Juanjo, Heras, Pantani, Jalabert, Menshov, David Millard, Olano, Ullrich, Samu, Botero, Sevilla, Riccó, Scarponi, Thévened, Peter Winnen, Petacchi, entre otros, una pequeña lista que los medios se desplayaron en elogios y hazañas épicas.
felicitaciones MVP
Eres ejemplo para la futura generación de ciclistas.