Por @pmpalermo
Horas después de las revelaciones de Janez Brajkovič, otro ciclista profesional reconoció haber tenido desórdenes alimentarios. Se trata de Clément Chevrier, hombre del AG2R La Mondiale, que padeció anorexia hace una década.
El pedalista reconoció su problema en declaraciones a La Montagne. “Vivimos en una burbuja, obsesionados por lo que comemos. Todo empieza con la búsqueda de rendimiento para convertirse en profesional. Y para mí ser profesional, era el sueño de niño”, indicó.
“Algunos toman las cosas más en serio que otros. Cuando tienes 18-19 años eres mentalmente más débil. Y debo decir también que a mí me gusta hacer las cosas a fondo … Realmente disfruté haciendo el trabajo. El placer de sentirse delgado, el placer de sentirse ligero. Fue ese enfoque. No quería comer pasteles. Disfruté comiendo aire, ensalada”. se sinceró.
Sin embargo, el atleta nunca se percató de su bajo peso, inferior a los 50 kg. Afortunadamente para él, su periplo profesional lo llevó a competir en Estados Unidos, donde la mentalidad es diferente a la europea. “Allí cambié todo. En Europa, tenemos el culto al cuerpo afilado, incluso antes de la carrera. Juzgamos a los ciclistas según lo finos que están”, contó.
En su retorno al viejo continente, Chevrier pudo sostener lo aprendido en América, convirtiéndose en una persona sana. “Necesitamos que la gente de cuenta de esto, no somos superhombres, no somos máquinas”, sentenció.
Pablo Martín Palermo
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