Por @JohanGMetal
Buenas ideas es lo que necesita en tiempos de crisis, por eso los organizadores de la carrera World Tour Bretagne Classic, están ya planeando una serie de estrategias que les permitan no solo realizar la competición en fechas normales, sino que además puedan cumplir con las medidas de seguridad establecidas, y porque no hasta generar algún beneficio económico.
La Bretagne Classic – Ouest-France es una de las pocas carreras a las que no se le ha modificado drásticamente el calendario, solo se ha movido del 23 al 25 de agosto, sin embargo esta fecha entra dentro de la nueva restricción que ha establecido el gobierno de Francia, en la cual no se pueden realizar eventos de más de 5000 espectadores hasta el 1 de septiembre.
Por eso, la organización ha pensado en cobrar 10 euros por persona si es que quieren ir a ver la carrera. “Si el límite es de cinco mil personas, queremos limitar el número de espectadores al final a un máximo de tres mil. Cobrar limita el número de personas, lo que permite cumplir con los requisitos de seguridad. Todos los visitantes también recibirán una máscara facial numerada”, dijo Tranvaux, representante de la organización a Ouest – France.
“Tenemos que luchar para salvar nuestro ciclismo. Correr es vital para los ciclistas”, concluyó.
Johan Fernando Gómez
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