Corredores a seguir en 2020 – Carl Fredrik Hagen, 8vo en su primera grande ¡siendo neoprofesional!

Por David Hunter

Cada tanto aparece un ciclista que rompe con las reglas, algo sumamente interesante de ver en el mundo del ciclismo. Carl Fredrik Hagen paso a profesionales con 27 años, algo poco usual, y acabó 8vo en la Vuelta a España, su primera gran vuelta en su primera campaña pro. Hagen es un talento especial, evidencia de la multitud de caminos que puede haber hacia el éxito.

“Haber pasado a profesionales más tarde es una ventaja. Soy fisiológicamente más fuerte”, contó en exclusiva a Ciclismo Internacional.

Vayamos directo a la Vuelta, más precisamente al día que hizo su movida. Fue en la etapa 8, cuando se coló en una de tantas fugas mientras ayudaba a Tosh Van Der Sande. Ese día, Carl aventajó al pelotón en 9:24 y saltó a la 7ma posición, metiéndose en un top 10 que ya no abandonaría.

“Mi objetivo, si todo iba bien, era terminar la carrera. Luego, apuntar al top 20. Era realista, pero muy complicado, así que jamás pensé en estar en el top 10”, reconoció el noruego, de 1.80 m y 65 kg.

“No me tomé un día libre. Mis piernas fueron a más constantemente, sobre todo en la última semana. No sólo lo veía en los números del potenciómetro, lo sentía”, siguió.

“Sabía que sería una competencia muy exigente y lo fue. Física y mentalmente, acabé exhausto. Es muy difícil mantener el nivel de concentración las 24 hs, los siete días de la semana, durante tres semanas”, aclaró nuestro invitado.

¿Qué recuerdas del día de los abanicos?

“Fue una jornada especial, una experiencia única que adquirí y, por supuesto, una enorme frustración. Sabía que podía ser un parcial crítico, estaba nervioso desde la salida. Pude acabar con los gallos y me saqué un enorme peso de encima”, relató.

Concluir 8vo en tu primera grande es un logro tremendo, especialmente en una Vuelta con tanta exigencia. Sin embargo, 2019 no fue sólo la cita española para Carl. Vale la pena recordar que fue 15to en Romandía, 10mo en el Tour de Noruega, 8vo en el Tour de Guangxi y 3ro en una etapa del Dauphiné.

“Estoy muy feliz con mi temporada. Es mi primer año como pro y sólo quería aprender, ayudar al equipo y no pensaba en resultados. Sin embargo, llegaron porque aproveché las oportunidades y estoy agradecido de que me las dieran”, afirmó.

Arribar a la escena profesional bastante más tarde que la mayoría pudo haber generado dudas en nuestro amigo noruego. Pero las disipó rápido.

“Me demostré a mi mismo desde el inicio que tenía la capacidad para correr en el World Tour. Soy lo suficientemente fuerte”, proclamó.

Pero las dudas estaban y por eso sus retos previos eran muy inferiores a los que luego logró.

“Mi objetivo era el equipo, dar lo mejor de mí. Lo que vino después sirvió para hacerme más sólido”, resaltó Hagen.

Usualmente, los neoprofesionales lucen como niños corriendo contra hombres cuando entran al World Tour. Pero este no fue el caso, y la edad jugó un papel importante en eso.

“El nivel competitivo no fue un desafío para mí. He llevado mi progresión paso a paso. Y lo hice del modo correcto para estar listo cuando llegara el momento”, refirió.

La mayor parte de los equipos diseñan sus calendarios en el invierno y en Lotto-Soudal están en ello. Pero si esta nota sirve de algo, Hagen sabe lo que quiere para 2020.

“Mi cronograma no está finalizado, pero anhelo combinar carreras de una semana con grandes vueltas, los JJOO y el Mundial. He soñado con los Juegos desde que empecé en el ciclismo y los de Tokio se adaptan a mis características. Espero Noruega me convoque”, opinó.

“Sería un sueño cumplido. Igual, hay muchas otras carreras a las que apunto antes de los JJOO, así que un objetivo es la constancia, de inicio a cierre de temporada”, completó.

Con recorridos duros en  Tokio y el Mundial, 2020 es un año para escaladores. Con una progresión tan veloz, será interesante ver cómo maneja Lotto el calendario de Hagen. El equipo no cuenta con muchos efectivos que puedan pelear por citas onduladas, así que es probable que le concedan galones.

“Estoy muy feliz por las oportunidades recibidas. Mis actuaciones fueron una retribución y espero que eso siga en el futuro”, reflexionó.

Un aspecto interesante del ciclismo es la progresión física luego de una ronda de tres semanas. ¿La espera Carl para 2020?

“De hecho, ya siento que soy más fuerte. Mi inicio de año sé que será con un nivel de base superior al de una temporada atrás”, analizó.

2019 empezó de un modo y, según salieron las cosas, acabó con un enorme salto de calidad por parte de Hagen. Pero eso también acarreó más responsabilidades, convirtiéndolo en un posible líder dentro del conjunto belga.

“No me veía de líder, era mi primer año. Eso sí, me dieron libertad varias veces y me dio mucha felicidad que creyeran en mí. Siempre pongo lo grupal por encima de lo individual y seguirá siendo así. Pero es un honor ofrecer resultados a la formación. Quizás tiene que ver con mi forma de ser, porque siempre me fijo en el bienestar de aquellos que me rodean. Me gustan las cosas claras”, tiró.

En el cierre, dejó su deseo navideño…

“Estoy motivado y ansioso por dar nuevos saltos de calidad. Mi preparación ya empezó y trataré de disfrutar cada día, centrándome en las cosas correctas cuando sea el momento oportuno”, se despidió.

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