¿Cuál es el techo de Sagan?

Por @pmpalermo

Peter Sagan es un portento de la naturaleza y así lo demostró desde su irrupción en la élite hace ya cuatro temporadas, cuando tras no ser contratado por Quick Step, Liquigas le dio la oportunidad y el eslovaco retribuyó la confianza levantando los brazos por duplicado en la prestigiosa París Niza y con menos de dos semanas como corredor profesional.

Dueño de una juventud insultante y un talento excepcional, ha progresado permanentemente desde entonces  por lo que entre otras cualidades, su resistencia es mayor y también su capacidad para superar subidas y repechos, lo que lo transforma en contendor a lo largo y ancho del calendario.

Sagan se transformó con el correr del tiempo en ese con el que nadie quiere tener que definir una prueba debido a su invencible punta de velocidad y la creciente versatilidad que le permite, por ejemplo, superar los adoquines de Flandes, la tierra de la Strade Bianche, el kilometraje de la Milán San remo (este año fue 2º en todas) o ganar la regularidad en el Tour de Francia.

Para ilustrar mejor lo imponente de sus prestaciones, en  2013 ganó de febrero a septiembre, se quedó con al menos un parcial en todas las competencias por etapas en las que tomó parte a excepción del Tour de San Luis y fue podio en varias de las clásicas que disputó, con triunfos en Gante Wevelgem y Flecha Brabanzona.

Nuestro protagonista concluyó el año con 22 triunfos en 90 días de competición, mejorando una vez más sus estadísticas ya que desde su debut en 2010 ha ido a más, con 5 dianas en la temporada inaugural, 15 y 16 en las siguientes y la mencionada veintena del presente curso.Sencillamente impresionante.

Pero a la vez, teniendo en cuenta su edad y los avances que efectúa permanentemente en sus capacidades, se abre la incógnita de saber hasta dónde puede llegar el rebelde pedalista de Cannondale a quién su representante, Giovanni Lombardi, denominó como  el próximo Eddy Merckx en una nota otorgada a esta misma web.

Sagan ha demostrado en su corta trayectoria que pocas pruebas se le resisten, y que consigue aquello que tiene entre ceja y ceja, por lo que sus contrincantes tiemblan ante la certeza de saberse vencidos si llegan a una definición contra el rocoso velocista, una máquina de ganar que a los 23 años atesora 61 victorias en su envidiable palmarés  al que faltan pocos lauros por agregar.

La cuestión pasa entonces por las metas que se imponga Hulk, ya que si bien se antoja imposible que equipare a Merckx y se transforme en un corredor de grandes vueltas, sí es factible que se vista algún día de Arco Iris, tiranice la clasificación de puntos del Tour en la próxima década, acumule clásicas indiscriminadamente e incluso se aproxime en la general de vueltas de una semana como  París Niza o Tirreno Adriático.

De hecho, en ésta última carrera, ganó en una de las jornadas más duras que se recuerden en años, en medio de un sinnúmero de abandonos, bajo la lluvia, tras una maratón de 209 kilómetros, más de 3000 metros de desnivel acumulado y llegando por delante de los mejores exponentes del mundo pedal.

Pero no terminan allí las habilidades de nuestro protagonista, quién gracias a su pasado en el mountain bike es dueño de un gran talento y valentía para los descensos, tal y como dejó en claro en reiteradas oportunidades, destacando el parcial del Tour de Suiza 2011 en el que batió a Cunego tras alcanzarlo en una bajada técnica y peligrosa como pocas.

En más de una ocasión, el cuerpo médico del conjunto italiano se mostró asombrado por los valores sobre humanos que arrojaban diversos exámenes realizados en el poderoso atleta, hecho que potencia aún más las conjeturas sobre sus límites, que podrían encontrar un techo sólo en la mente y la voluntad del propio corredor.

Sagan, que cumplirá 24 años en enero, es mejor a cada momento que pasa puesto que a la sabiduría que dan las experiencias suma un deseo de superación enorme y el apoyo de una escuadra que lo tiene como líder absoluto a punto tal que se habla de una extensión de contrato millonaria y la conformación de un bloque todavía más fuerte a su alrededor.

Lo concreto es que el particular corredor ya acumula un palmarés con el que podría retirarse tranquilo, por lo que asusta de cara al futuro si mantiene el nivel de progresión mostrado y mejora un poco su punto más flaco: el comportamiento, muy propio de un chico de su edad pero lejano a lo que es un profesional de este deporte.

Por todo esto, si el eslovaco se centra un poco más, la salud lo respeta y continúa su desarrollo físico, está llamado a ser la cabeza visible de la nueva generación que toma el relevo y ya es presente, pero sobre todo a escribir una página importante en la historia grande del ciclismo, que juzgará finalmente si fue el nuevo Eddy Merckx o el primer Peter Sagan.

Pablo Martín Palermo