De ganar 300 euros a conquistar grandes vueltas

De sus humildes inicios a convertirse en una de las mayores estrellas del ciclismo mundial, su camino no siempre estuvo claro. Antes de alcanzar la cima en las grandes vueltas, la idea de dedicarse al ciclismo profesional parecía un sueño lejano.

Así lo relata Primoz Roglic, de cuando llegó a Jumbo: “No quería que me pagaran allí. Ni siquiera soñaba con correr entonces y no conocía a nadie en el ciclismo”, recuerda al hablar de sus primeros pasos. “Solo veía las carreras por televisión y veía lo profesional que era el ciclismo. Era una locura, pero pensé que era algo que podía hacer”, comentó a Kristjan Vreček.

Su primer salario fue de apenas 300 euros, una cifra modesta que marcó el comienzo de su carrera. “Ese fue el inicio. No dudé en firmar porque no sabía nada. Si no sabes qué esperar y no te importa, simplemente hazlo. Luego superas los desafíos que se te presenten”, explicó.

El punto de inflexión llegó en 2016, durante el prólogo del Giro de Italia en Apeldoorn, donde terminó segundo detrás de Tom Dumoulin. “En ese momento me di cuenta de que también podía hacer una contrarreloj y sentí que quizás podía lograr mucho más”, confesó.

A pesar de las dificultades iniciales, y los múltiples problemas con las caídas, nunca ha lamentado su trayecto en el deporte. “Ni siquiera pensé en cambiar nada, porque tampoco tengo malos sentimientos al respecto. Fue lo mejor que pude conseguir y está bien.” Desde ese primer sueldo hasta ganar diferentes ediciones de la Vuelta a España, su historia es un ejemplo de perseverancia y superación.

Fernando Estupiñán

Únete al canal de WhatsApp de Ciclismo Internacional

Ingresa a nuestro foro de Telegram

Puedes encontrarnos en Instagram

No te pierdas #CiclismoInterTV en YouTube 

¿Te gusta lo que hacemos? síguenos en @CiclismoInter

Súmate en Facebook: Ciclismo Internacional

Copyright © 2012-2024 Ciclismo Internacional. All Rights Reserved