Por @amatiz12
En ausencia de su jefe natural, Nairo Quintana, el Arkéa designa como capo para pruebas con perfil montañoso a quien a priori es su segunda baza, Warren Barguil. Sin embargo, esa oportunidad del bretón de comandar a su escuadra en un certamen de renombre como la París-Niza, está en ‘veremos’, pues ya aparecen algunos limitantes físicos que lo llevarían a no ser de la partida de la carrera gala el próximo 7 de marzo.
Según confirmó el propio corredor a los medios previo a la salida de la Drome Classic, no ha podido darle una decorosa apertura a su temporada ya que padece de molestias estomacales que lo han incomodado en competencia, “No estoy al 100% en forma, estoy muy decepcionado”, expresó Barguil, quien profundizó sobre los dolores que lo laceran, “Tengo dolor después de cada cena, paso noches complicadas”.
Acerca de las medidas que tomará ante dicha dificultad, mencionó que el día de hoy se hará unos exámenes médicos para dictaminar las causas de esta molestia, pero en especial, que, si los dolores persisten, tendrá que prescindir de su asistencia a la ‘Carrera del Sol’, “Tomaré los exámenes el lunes (hoy), pero si sigue así, no podré hacer París-Niza”, aseveró el rey de la montaña del Tour de Francia 2017.
Esto alteraría los planes del Arkéa para esa ronda, pues sin Barguil se quedarían sin una baza para la general y, por consiguiente, deberían apuntar a otras metas como cazar etapas. Es de suma relevancia aclarar que, en la hipotética ausencia de Warren, el colombiano Nairo Quintana no lo podría suplir, ya que en su cronograma se halla la Tirreno-Adriático que abre el telón el 10 de febrero, en plena disputa de la París-Niza.
A sabiendas de que el cafetero y el francés, son los únicos miembros del cuadro de Emmanuel Hubert con el talante para disputar la victoria final en carreras de ese estilo, se descarta por completo que, sin Barguil, opten por ese objetivo.
Sin embargo, el escalador de 29 años pondrá su mayor empeño en asistir a la 79ª edición de la reconocida cita, ya que además tiene sed de revancha, ante lo esquiva que le ha sido, “Es una carrera que a veces me ama, a veces no me ama, depende de los años, ¡pero soy terco, quiero volver!”, sentenció un Barguil cuya mejor presentación en la París-Niza la logró en 2017, siendo octavo de la tabla general final.
Alejandro Matiz
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