Por @FXavierVidela
Chris Froome (Team Sky) está lito para encarar la última semana del 101° Giro de Italia con todo lo que le quede, con el objetivo de recuperar el tiempo perdido. El británico iniciará el tramo final con 4’52” de desventaja sobre el líder Simon Yates (Mitchelton-Scott).
“Si gano algo con Tom Dumoulin, seré muy feliz. Es el campeón del mundo de crono, así que no espero ganar nada con él mañana, pero veamos”, expresó el oriundo de Kenia, quien cree que el neerlandés del Team Sunweb es el hombre a vencer en la contrarreloj de este martes, sobre 34.2 km.
“Voy a dar todo lo que tengo y ciertamente no voy a esperar nada para el resto de este Giro. Ha sido una carrera brutal, pero también ha sido una carrera hermosa”, añadió Froome, quien regresó a la ‘Corsa Rosa’ para intentar obtener el triplete consecutivo, tras ganar el Tour de France y la Vuelta a España 2017.
“[La brecha] es grande, especialmente en la forma en que Simon [Yates] ha estado corriendo. Hasta ahora no ha mostrado un momento de debilidad y solo parece fortalecerse”, expresó Chris, quien no pierde la esperanza. “Todavía voy a centrarme en la general, no voy a rendirme”.
“Creo que está bastante claro, Zoncolan iba a ser la ascensión más icónica del Giro. Hice el reconocimiento y puse todo lo que tenía en esa subida. Fue una experiencia increíble y es una decisión que no me arrepiento”, afirmó el del Team Sky, quien cree que la energía gastada el sábado tuvo un efecto perjudicial al día siguiente.
“No me arrepiento de poner todo en juego ese día, fue una experiencia increíble. El ambiente en la escalada, las miles de personas allí arriba. Hace ocho años, cuando lo subí por primera vez, casi dependía del público para ascender, me daban empujones cada 20 metros. Ahora regresé y gané, es un momento que atesoraré por el resto de mi vida”, concluyó.
Franco Xavier Videla
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