El 27 de septiembre del año pasado, el ciclismo profesional vivió un día negro. Por un lado, la suiza Muriel Furrer fallecía tras una caída en el que se golpeó la cabeza en el Campeonato Mundial de Zúrich en un hecho que reveló la negligencia de la organización y la Unión Ciclística Internacional (UCI) pues fue localizada más de una hora y media después de accidentarse al estar prohibido el uso de GPS y radios. Por otro lado, ese mismo día llegó un comunicado de la Real Unión Ciclista Neerlandesa que comunicaba la muerte de un joven ciclista: Bas van Belle, de 24 años, hermano de Loe –ciclista de Visma Lease a Bike- y de Lisa, del equipo femenino SD Worx-Protime.
Hermano de ciclista de Visma se quitó la vida por no llegar a profesional
En su momento, por respeto, no se había comunicado el motivo de su descenso, limitándose a mencionar que había sido inesperado. Van Belle corrió para el equipo continental luxemburgués Leopard Pro Cycling en 2019 y 2020. Posteriormente, se unió al club ciclista Wielerploeg Groot Amsterdam. Con este equipo, logró varios puestos destacados: en 2023, terminó tercero en el Tour de Okinawa (1.2) en Japón y en una etapa de la Course Cycliste de Solidarnosc (2.2) en Polonia. Bas había corrido hasta poco antes de su muerte, el 22 de septiembre de 2024, con un puesto 65 en la Ronde van Midden-Brabant, una carrera neerlandesa.
Dear Loe and family,
We are deeply saddened by the sudden passing of your brother and son, Bas.
Our thoughts are with you and your loved ones during this incredibly difficult time.
We wish you strength and courage to face the days ahead, and our hearts go out to all of Bas’s…
— Team Visma | Lease a Bike (@vismaleaseabike) September 27, 2024
Poco más de un año después, sus dos hermanos menores en una entrevista con AD contaron lo sucedido. Bas se había suicidado. “Pude hablar con él sobre sus problemas”, contó Lisa, de 21 años. “La depresión es algo que naturalmente dura más. Tiene altibajos. Un mes antes de su muerte, lo visité durante una semana en Sittard, donde vivía. Fue muy agradable, y además estaba muy alegre”. Y tras lo cual, recordó: “Cuando no estaba físicamente presente, solíamos llamarnos por las noches. O nos escribíamos mensajes, casi todos los días. Él hablaba abiertamente de sus días difíciles. Me alegra que hayamos tenido un contacto tan cercano durante el último mes. Pero eso también lo hace contradictorio. Siento que no ayudó. Es parte del duelo”.
“Cuando se lesionó, no sabía realmente quién era”
Loe, dos años mayor que Lisa y corredor de Visma desde 2024 (tras tres temporadas en el equipo de desarrollo) explicó que la depresión de Bas estuvo vinculada con su carrera como ciclista. Quería llegar al profesionalismo, pero una lesión en la arteria femoral lo obligó a renunciar a ese sueño. “Cuando eso sucedió, se preguntó: ¿Quién soy entonces? ¿Qué quiero? Esa fue la esencia de su lucha”, indicó Loe. Lisa agregó: “Eso es parte de la enfermedad. No saber realmente quién eres. Había trabajado muy duro para lograrlo. Con tanta dedicación y precisión. A menudo se le puede decir a alguien: eres tan amable e inteligente. Hay tantas otras cosas. Pero eso no se percibe. Es muy difícil de ver”.
“A veces, las cosas mejoraban: entonces podía aceptarlo. Reanudó sus estudios de fisioterapia. Experimentó la vida normal. Fue a un festival con amigos. Ese último verano le dio mucha esperanza. Eso debería haber hecho sonar las alarmas. Es algo que se ve a menudo con esta enfermedad. Pero en aquel entonces, estábamos más que nada contentos de que estuviera bien”, lamentó Loe.
Volver a la bicicleta como parte del duelo
Tras la pérdida de su hermano mayor, Loe y Lisa tomaron al ciclismo como forma de atravesar el proceso de duelo. “Quería volver a montar en bicicleta rápidamente después de su muerte. Para buscar a Bas, pero de una manera diferente. Era difícil entrenar en Limburgo. Íbamos juntos en bicicleta por casi todas las calles de allí. En el lugar donde nos encontrábamos a menudo, miraba a la vuelta de la esquina: ¿pasaría por allí en bicicleta?”
En el caso de Lisa, apenas unas pocas semanas después, el 19 de octubre del año pasado, compitió en el Mundial de Ciclismo en Pista de Copenhague representando a Países Bajos. “A Bas le habría encantado que compitiera en ese Campeonato Mundial después de todos los preparativos. Pensé: ‘Voy a hacer esto por él también’. Fue muy duro y emotivo tan pronto después de la pérdida. Fue dos semanas después de la despedida. El deporte nos ha igualado. Nos permite entendernos. Me he acercado más a Bas a través del deporte. Eso también me motiva a seguir adelante. Puedo hablar con mis padres sobre la pérdida. Les ayuda a procesarla”.
La importancia de la salud mental
Loe, en tanto, volvió a competir en enero para Visma en el Tour Down Under, carrera que no obstante tuvo que abandonar tras una caída en la quinta etapa. Luego, tras el Tour de Gran Bretaña, finalizó la temporada por una cirugía en la arteria ilíaca externa. “Quería volver a hacer las cosas de inmediato. De hecho, eso surgió de forma natural. No quería quedarme encerrado. Es mi manera de afrontarlo. Nadie puede reemplazar la forma en que Bas nos trató a Lisa y a mí. El vacío que dejó es insustituible”. Loe y Lisa se abrieron para contar esta historia que nuevamente pone en relieve la importancia de la salud mental en el ciclismo y que los equipos cuenten, por ejemplo, con asesoría de psicólogos deportivos. Corredores como Robin Orins y Leo Hayter atravesaron graves situaciones de depresión que lograron superar.
En caso de necesitar ayuda, puedes comunicarte con las líneas gratuitas de asistencia y acompañamiento en salud mental de tu país, atendidas por profesionales en la materia. Puedes obtener más información aquí.
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