“João le dijo que apretara, él dijo ‘no lo haré’ y João atacó, furioso”. Nuevas revelaciones del conflicto interno que hubo en UAE en una de las carreras de la temporada. Un ejemplo -y van…- de la falta de armonía interna que reina en la escuadra cuando Tadej Pogacar no corre y todos los demás se rebelan en busca de lucimiento personal. El que quedó mal parado, nuevamente, es el suizo Jan Christen.
¿Qué sucedió en Suiza?
No es ningún secreto que cuando Tadej Pogacar no corre el resto de sus compañeros buscan mostrarse y tener algún momento de brillo propio. Eso ha llevado a que se repitan situaciones de conflicto interno, con los casos de Juan Ayuso como los más conocidos, pero también hubo otros como el que protagonizó Jan Christen. El joven se rehusó a trabajar para João Almeida en el Tour de Suiza, donde el luso era líder absoluto.
Y aunque la situación no se apreció por TV, Mikkel Bjerg se encargó de hacerla pública. “Es bueno ver que Christen tiene buenas piernas después del accidente. Es una pena que no quiera ayudar al equipo con esas piernas”, comentó a la televisión danesa, desatando la polémica que acabaría con el helvético disculpándose al día siguiente. Lo más llamativo es que Almeida, reconocido por todos como un gran compañero, había regalado a Jan el triunfo en la etapa 2 de Volta ao Algarve, la carrera de casa para el portugués.
Hechas las aclaraciones, que pueden profundizar en los links compartidos, aparecen nuevas declaraciones que agudizan las diferencias. Es que un corredor de UAE que decidió permanecer anónimo le contó más detalles a CyclingUpToDate. “Si hubiera sido yo habría optado por devolver el favor”, comenzó. “Por lo que sé, Jan quería ser líder en el Tour de Suiza”, siguió, marcando un punto lógico por ser local.
“João le dijo que apretara, él dijo ‘no lo haré’ y João atacó, furioso”
A continuación dejó una sentencia aún más clarificadora. Es que el caos reinó en la etapa inicial y allí fue donde se produjeron los ataques una vez que el jefe de filas le pidió al gregario rebelde que trabaje bajo la lluvia. “João le dijo que apretara, él dijo ‘no lo haré’ y João atacó, furioso”, narró. La ofensiva del portugués fue en una cota a 15 kilómetros de meta y finalmente no tuvo efecto. Más adelante, en la trepada a meta, llegó el salto de Christen que terminó de romper las relaciones.
Pese a ser reconocido como un talento natural con mucho potencial, el suizo no ha explotado todavía al punto de poder imponerse a un capo de la estructura como es Almeida. El año próximo compartirán nuevamente en el Giro de Italia y está claro quién será el capo, con lo que no quedará más remedio para uno de los favoritos del staff (NdR: Christen tiene contrato hasta 2030) que arremangarse y vaciarse en beneficio de Almeida, subcampeón de la Vuelta a España y uno de los mejores vueltómanos de la actualidad.
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