Las acusaciones de Rasmussen, un nuevo golpe al ciclismo

Por @pmpalermo

Poco duró la paz en el mundo de las dos ruedas, que parecía haber dejado atrás la ultima sacudida de hace un año cuando Lance Armstrong fue linchado y la USADA destapó el mayor fraude de la historia del deporte.

Pero la publicación del libro del pollo Michael Rasmussen reabrió las heridas de este deporte ya que además de confesar sus pecados con lujo de detalles,también se encargó de señalar a ex compañeros de Rabobank.

Michael Boogerd, Denis Menchov o Erik Dekker fueron algunos de los nombres que salieron a la luz en la publicación del danés, que además dio detalles escalofriantes como que estuvo cerca de hacerse una transfusión con la sangre de su propio padre.

Las repercusiones no se hicieron esperar y el mismo Rasmussen tuvo que desmentir que Freire y Flecha hayan incurrido  en la misma falta, ya que si bien el delgado ex atleta escribió que todo el equipo se dopó, el nunca vio a los españoles hacerlo.

Asimismo se mostró arrepentido pero por no haberse dopado en 2006, momento en que su escuadra no lo permitió y sus bolsas de sangre acabaron en el río Danubio; totalmente distinto fue lo acontecido en 2005, cuando de haber usado un poco más “hubiera peleado con Armstrong hasta París”.

Pero no quedó allí el cúmulo de revelaciones ya que el nefasto protagonista de este capítulo hizo alusión a la Grande Bouclé de 2007 que ganó Contador gracias a su descalificación, prueba en la que se sintió tan fuerte que “pudo haber dejado 80 corredores fuera de control en el Aubisque y adelantado al de Pinto en más de dos minutos” si así lo hubiera querido.

Por su parte, y a la espera de nuevas reacciones, Orica GreenEdge invitó a Pieter Weening a reafirmar su pasado libre de drogas puesto que el holandés formó parte del conjunto naranja y compartió filas con los acusados por Rasmussen.

Pablo Martín Palermo