Miguel Ubeto regresa a Europa con Southeast: “Cumplí mi sanción y pasé de página”
Por @pmpalermo
Como era de esperarse, media docena de ciclistas venezolanos emprendieron vuelo hacia Europa para incorporarse a las filas del Southeast italiano. Esto responde al convenio alcanzado entre el gobierno del país sudamericano y los directivos del conjunto Pro Continental.
Sin embargo, lo que sí sorprende, es que uno de los pedalistas elegidos por el Ministerio de deporte venezolano sea Miguel Ubeto. El incombustible corredor de 39 años, que fue suspendido en 2013 cuando se le detectó la sustancia GW 1516, cumplió largamente su sanción y vuelve a los primeros planos cuando todo apuntaba en la dirección opuesta.
Pero su título de campeón Panamericano le valió una última chance en el ciclismo grande, y Ubeto así lo ratificó en exclusiva con ciclismointernacional.com. “Esta oportunidad es producto del triunfo en los Panamericanos. Todo salió gracias al Ministerio de Deportes, ya que me ofrecieron lo mejor para prepararme para los JJOO”, inicia su relato el ex Lampre.
“Me pidieron que presentara un proyecto de equipo profesional. En su momento barajamos hacer algo con Matxin y Gianetti, pero ahora, con presupuesto más limitado, logramos lo que Androni no pudo”, continúa.
“El contrato es por un año y espero que el próximo ciclo olímpico Venezuela tenga una mejor situación. Yo correré mientras tenga motivación y las condiciones estén al nivel de los resultados. Por ahora es así, ya que fui campeón Panamericano, fui 7° en el UCI América, 2° en el nacional de ruta, y logré varios podios más en México y Guadalupe”, explica el simpático ciclista.
Camino de las cuatro décadas de vida, Miguel sabe que no tiene margen de error, pero cree ciegamente en sus condiciones y es consciente del lugar donde está parado. “Físicamente estoy al 70%, empecé con calma y estuve en la altura de México, todo diagramado por mi entrenador desde hace cinco años, Hunter Allen, el responsable de mi medalla panamericana”, comenta. “El objetivo es crecer en mi condición cuando tenga el calendario en la mano. Sé que a los 39 años no es fácil, pero la motivación es la de un chico de 20 y la cabeza es lo más importante”, aclara.
Con o sin programa de carreras listo, nada impide soñar al veterano corredor. “El calendario lo definiremos en breve, pero haré muchas clásicas. Sueño con hacer Milán San Remo y el Giro de Italia. Nunca corrí más de 13 días seguidos, pero voy a luchar por estar en esa prueba. Todo para prepararme para los JJOO”, suelta, tras varias evasivas.
El venezolano llega a una estructura llena de jóvenes y, con una trayectoria tan extensa como la suya, su papel cae de maduro. “Soy un todoterreno. Puedo defenderme en subidas de hasta 10 kilómetros e iré a ayudar a los jóvenes, como el propio Fedi, que ganó el fin de semana. También estaré para Mareczko, con quien ya nos conocemos. Al margen del aspecto deportivo, animaré a los compañeros”, indica.
El dopaje en su trayectoria
Poco después de detectado su positivo, Ubeto inició un ciclo de charlas denominado “Mi testimonio, el Juego limpio” con el que trató de transmitir su experiencia a los más jóvenes. En dicho período, el corredor atravesó diversos estadíos emocionales que, no sin mucho sufrimiento, le permitieron seguir en el deporte que ama.
“Esas charlas no sirvieron para dar vuelta de página sino que abrieron otra en mi vida. Me doy cuenta que nuestro deporte venezolano, no sólo el ciclismo, desconoce lo que es el dopaje. Las autoridades no han hecho una campaña eficaz para que los jóvenes tengan las herramientas y valores para evitar doparse. Si se los prepara, tendrán la fortaleza de rechazar productos dopantes”, asevera.
“Las charlas las disfruté, pero también me dolieron, porque recordaron momentos de mi trayectoria, como perderme el Tour de Francia del centenario. Eso me enseñó que mi carrera no terminaría allí y aquí estoy, sobre la bici”, añade.
Con la calma que brindan los golpes, Ubeto no esquiva ninguna pregunta, por lo que habla sin pelos en la lengua sobre su positivo. “Mi caso fue particular. Tuve una caída en la Vuelta al Táchira donde me fracturé la glenoides y eso requirió una operación muy compleja, en la que perdí un litro de sangre. En la recuperación usé un medicamento que no estaba permitido y saltó en los controles”, narra.
“Soy culpable de eso, porque no indagué como correspondía en mi afán por regresar rápido. Asumí mi responsabilidad, cumplí la sanción y, en ese aspecto, sí que pasé de página. Los alegatos que dimos a la UCI sirivieron para que la sanción fuera reducida y regresé después de un año y dos meses”, aclara.
El ciclismo de Venezuela, Androni y Southeast
A nadie escapa el litigio entre Gianni Savio y el gobierno de Venezuela, que dejó de patrocinar a Androni, por motivos que nuestro invitado explica. “Venezuela rompió con Androni y no se cumplió con el pago porque tampoco ellos cumplieron con su parte del trato. Eso era, entre otras cosas, la formación de un equipo sub23, viajes y formación de jóvenes en Italia, etc. Además, los venezolanos que estaban allí no eran la cantidad prometida ni se les cumplió bien con el contrato”, sentencia.
Con eso en vista, redobla la apuesta. “El ciclismo de mi país tiene muchos talentos, como José Mendoza, un sub23 que luchó por la Vuelta al Táchira hasta el último día. Con el apoyo de Southeast tendremos corredores tremendos. Yonder Godoy es otro que apunta altísimo”, avisa.
“Los seis que correrán en Southeast son Luis Díaz, Yonder Godoy, Xavier Quevedo, Yonathan Monsalve, Tomás Gil y yo”, confirma Ubeto, que enseguida redondea. “El objetivo es que los ciclistas de Venezuela vuelvan al World Tour”.
Río 2016, sólo el comienzo
La jovialidad de Ubeto es admirable. No sólo su físico engaña, sino que sus ganas estimulan, algo qu para él es el secreto de su vigencia. “Es raro ver gente de casi 40 años con mi motivación y ese es mi fuerte. Iré día a día, y luego veré el próximo año. Este año es un sueño hecho realidad en si mismo y, si lograra el podio olímpico, tocaría el cielo con las manos”.
“Hace un año era casi imposible pensar en los JJO de Río”, prosigue. “Después del Panamericano, eso cambió. Mi objetivo es Río y debo tener la preparación adecuada; ya estudié el recorrido y trataré de ir a ver el trazado. Además, estoy a dieta para perder peso y subir mejor”, confiesa desde el aeropuerto.
“Southeast me permitirá hacer carreras idóneas para arribar a Brasil de la mejor manera. Será duro enfrentar estos kilómetrajes y el nivel, aunque estoy confiado en lograrlo”, completa.
En el cierre, deja un mensaje. “No tengo nada que perder, tengo todo por ganar. Cuando aceptas tus errores, los asumes y apoyas a los jóvenes como hago a través de mi Fundación “Venezuela País de Futuro”, Dios te premia. Todos pensaban que estaba perdido y renací, así que hay Ubeto para rato, arriba y debajo de la bici”, avisa.
“Tengo muchos proyectos, como escribir un libro para transmitir mis vivencias, formar chicos y mucho más. Esto recién comienza, aunque me retire como corredor”, se despide, exultante, Miguel Ubeto.
Pablo Martín Palermo
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