Por @pmpalermo
Nairo Quintana no se detiene y, días después de haber arrasado la Volta a la Comunitat Valenciana, volvió a la carga con un viaje a Italia. Allí, como no podía ser de otro modo, está reconociendo etapas de la próxima edición de la Corsa Rosa.
El colombiano, que en breve viajará al desierto para perfeccionarse en los abanicos, aprovechó un hueco en su planificación para recorrer algunos tramos del Giro, más específicamente, la ascensión a Piancavallo.
La misma es famosa por la remontada de Marco Pantani en 1998, Nairo lo sabe y, además de tener una chance de escribir una página épica en la historia, la trepada será importante para la definición de la carrera, ya que está dispuesta en la etapa 19 y será la última llegada en alto.
Davide Cimolai (FDJ) y Enrico Salvador (Tirol) confirmaron la noticia puesto que se cruzaron al escalador cafetero, quien rodaba junto al español Rubén Fernández. De hecho, el propio Cimolai -oriundo de la zona- describió en sus redes sociales parte del encuentro. “Hablé con Nairo y hasta le indiqué el punto en el que yo atacaría”, escribió. “El hombre está avisado, no tiene excusas”, añadió luego, en broma.
Lo cierto es que, si alguien pensaba que Quintana acudiría al Giro para entrenar, esto echa por tierra dichas conjeturas. Porque además de las estadísticas que marcan que en los últimos 3 años sólo una vez Nairo no estuvo en el top 5 de una competencia por etapas, ningún jefe de filas viaja a reconocer parciales de carreras en las que no disputarán.
Pablo Martín Palermo
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