Opinión: ¿Y si Egan Bernal deja de hacer generales?
Tal vez sea el momento para que el colombiano cambie de rol en el ciclismo y se dedique a cazar etapas y carreras de un día.

Hace tiempo que Egan Bernal no está a la altura de lo que supo ser, es decir, un campeón de grandes vueltas. Para ser más precisos, desde su última conquista del género, en el Giro de Italia de 2021. Y sin ser injustos con él, porque está claro que en el medio sufrió un accidente brutal, la realidad es que en esa temporada post pandemia había claros signos que apuntaban a que el de Zipaquirá, como tantos otros, no tenían los vatios para superar a los eslovenos. Encima después surgieron Vingegaard y Evenepoel, cerrando por completo la puerta a la clase media de los jefes de filas. Con eso en vista nos preguntamos: ¿Y si Egan Bernal deja de hacer generales?
Egan ya ganó
Lo de Bernal, a partir de ese título, ha sido sensacional, digno de película. Se accidentó y tuvo que reconstruirse -literalmente- y hoy en día está compitiendo al máximo nivel del ciclismo mundial. Pero que se entienda bien: ese nivel no es suficiente para regresarlo a lo más alto de la cadena alimenticia ciclística, donde supo estar justamente cuando coronó el Tour y la mencionada Corsa Rosa. ¿Tiene algo de malo? Para nada, es simplemente la exposición de un hecho, ratificado por el propio escarabajo en las entrevistas que ha concedido las últimas campañas.
En sus palabras, él ya ganó desde el momento que volvió a vivir una vida normal y a realizar su profesión de esa misma forma. Dicho esto, hilando fino y hablando de ciclismo de competición y alto rendimiento, Egan no tiene los vatios para ser competitivo contra quienes hoy dominan, aún cuando afirma mover mejores números que en su época dorada. Y no es Pogacar el espejo, eso ya sería medirlo contra el sol. Tampoco Vingegaard, algo parecido. Pero Bernal no ha sido capaz de hacer daño deportivo a gente como Yates, Del Toro, Carapaz, Caruso, Pelizzari o Gee, todos por encima suyo en el Giro, donde acabó a la nada desdeñable cifra de 12:42 del campeón, un gregario en Visma como el gemelo Simon. En la Vuelta, aún con sus problemas de salud -tenemos información de que lo aquejaban dolores- como atenuantes, tampoco lucía capaz de aspirar al podio siquiera, contra adversarios aún inferiores a los de mayo como Gall, Pidcock, Fortunato, Hindley… amén de Almeida y Jonas.
Egan Bernal es todo un símbolo del ciclismo latinoamericano y ya quedó en la historia como el único de esa región en haber ganado el Tour de France. Y, una vez más, su vida personal es digna de un guión de película. Pero con 28 años aún puede seguir escribiendo nuevos capítulos gloriosos…si cambia de frente. Con las grandes vueltas bloqueadas para hacer la general, el sudamericano tiene que proponer él mismo otra cosa. Ya verificó que atacando de lejos, como en el Giro, luego termina pagando los esfuerzos y se hunde solo.
¿Y si Egan Bernal deja de hacer generales?
Y en otras ocasiones aplicó la táctica de ir a rueda (que tampoco tenía demasiada opción) para maquillar un top 10, siempre y cuando la salud lo respete. ¿Es realmente eso lo que hará los próximos -no se sabe cuantos – años? Es demasiado joven para dedicarse a seguir ruedas y excesivamente competitivo para conformarse con ser relleno en las exhibiciones de otros. No, Bernal tiene que cambiar el chip y dejar de ser vueltómano, al menos en eventos de tres semanas.
Tampoco tiene sprint ni es el mejor croner, pero cuenta con más opciones de sorprender en citas de un día que en las grandes y al mismo tiempo encontrará más satisfacciones que sufriendo para lograr -con suerte- un top 10. Su momento ya pasó y hoy, en la Vuelta, descubrió lo que podría convertirse en su nuevo rol. Bernal estuvo en la escapada del día y fue sexto, su mejor clasificación en 15 parciales. Le sobra motor para este nuevo papel y sus contrincantes serían otra jerarquía y contaría con el factor incertidumbre que siempre tiene más peso que en las grandes. Sí, básicamente es dejar de ser cola de léon para convertirse en cabeza de ratón.
INEOS luce encaminado a una nueva era con Arensman ¿y Gee? al comando, y el escarabajo perdería preponderancia. También sería un modo de liberarse de cierta presión y, quien sabe, quizás eso sea el disparador para que encuentre por accidente otra oportunidad en lo que él tanto ama y lo encumbró, a lo Ben O´Connor el año pasado. Ah, y para sus aficionados, antes que salten tocados en su orgullo, no tiene nada de malo cazar etapas o carreras de un día, todo lo contrario, demostraría una gran inteligencia y quien sabe que carrera espera para sumarse a la vitrina de Egan, quien no gana mucho y puede maquillar su palmarés.
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