Quick-Step Floors, dueño de una primavera de ensueño
Por @FXavierVidela
Quick-Step Floors disfruta de una campaña primaveral mágica, siendo amo y señor en Bélgica, tierra de las grandes clásicas del ciclismo. A estas alturas, acumula 24 victorias en esta temporada, en el mejor inicio de su historia.
En un inicio regular, con un 5° en Omloop Het Nieuwsblad y un 12° en Kuurne-Bruxelles-Kuurne como mejores resultados en el fin de semana que abrió las clásicas de primavera, parecía que la escuadra de Patrick Lefeveré sentía el retiro de Tom Boonen, su gran estandarte; y el traspaso del italiano Matteo Trentin.
Como suele decirse, la primera victoria es la más difícil de conseguir. Y, a pesar de que ya habían alzado los brazos en 11 ocasiones durante este curso, el estreno en una clásica llegó en Le Samyn. Fue de la mano del neerlandés Niki Terpstra, quien remató un trabajo grupal excepcional y cortó una sequía de 17 meses.
De allí en más, las dianas fueron cayendo una a una. En otra labor fenomenal de toda la escuadra, Rémi Cavagna y Florian Sénéchal comandaron una exhibición en la Dwars door West-Vlaanderen, donde volvieron a hacer buena su superioridad en Bélgica.
En una formación bien redondeada y con oportunidades para todos, los neo-profesionales también tuvieron su chance de lucimiento, y no la desaprovecharon. Fabio Jakobsen y Álvaro Hodeg se estrenaron en la Nokere Koerse y Handzame Classic, respectivamente, luego de jornadas en las que sus compañeros se mostraron muy activos en cada corte, para luego controlar en los kilómetros finales y rematar al sprint. Por el mismo camino, Elia Viviani consiguió su sexto triunfo de 2018 en Driedaagse Brugge – De Panne, días más tarde.
Sin embargo, las citas World Tour aún estaban por venir, y allí debían demostrar su valía. Y no decepcionaron. En una clase magistral, Terpstra festejó en solitario en la E3 Harelbeke y un activo Gilbert completó el 1-2, dejando sin opciones a sus rivales. Dos jornadas después, volvieron a lucirse en la Gent-Wevelgem, aunque Elia Viviani no pudo culminar la tarea, llevándose un 2° lugar que supo a poco. Aún así, Quick-Step Floors dejaba en claro quién mandaba en Bélgica, tomando el toro por las astas en cada competencia.
Como prueba del gran abanico de aspirantes con que cuentan cada vez que toman la salida en una clásica adoquinada, el triunfo en solitario de Yves Lampaert en la Dwars door Vlaanderen (1.UWT). A pesar de no contar con la nómina titular, se las ingeniaron para formar parte de cada corte y llegar con opciones al cierre, donde el joven Lampaert demostró su astucia para superar a Teunissen y Vanmarcke.
El premio gordo llegó en el segundo monumento de la temporada, donde coronaron una gran campaña de la mano de Niki Terpstra, el destacado de la plantilla en esta época. El neerlandés de 33 años, quien parece haber recuperado el espacio y el brillo perdido en 2017, concretó un ataque a 27 kilómetros de meta, mientras sus compañeros se dedicaron a secar cada uno de los intentos de sus rivales, demostrando su superioridad numérica a la hora de los compases decisivos.
Tan claro como el agua es que, además de buenas piernas, hay que tener algo de suerte en este tipo de eventos. Y eso mismo ocurrió este miércoles en la Scheldeprijs donde, por distintos motivos, los grandes candidatos no llegaron a disputar el embalaje masivo. Tampoco el colombiano Álvaro Hodeg. Sin embargo, los dirigidos por Lefevere tenían una segunda carta para el sprint, Fabio Jakobsen, quien aprovechó la oportunidad y remató un gran lanzamiento de Stybar y Morkov, en una prueba marcada por las descalificaciones, las caídas y la lluvia.
Así, se presentarán este próximo domingo en la París-Roubaix con el objetivo de continuar por la buena senda. Con nueve victorias en las clásicas de pavés en el bolsillo, festejaron en cuatro de las últimas cinco disputadas (un 2° lugar en la restante, Gent-Wevelgem) y aspiran a coronar en el ‘Infierno del Norte’ una temporada primaveral de ensueño.
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E QUI PA ZO
es un placer ver al qst en esas carreteras estrechas, esos muros picantes, vuelan en el pavé, cierran cada hueco, vuelan a la victoria, desparraman rivales como hojas. uno a uno son menos q los sagan, los gva, los benut, los vanmarcke, etc, pero juntos son demoledores y el resto sufre tamaña superioridad.
a disfrutar el carrerón que viene el domingo, luego vendrán las gv con sus etapas adormecedoras que se definen en el último puerto.
gracias ciclismo, gracias qst.
Comparto la opinión de tio runner, ya vienen las grandes vueltas con el sopor…las clásicas son carreras competitivas y con quick step protagonistas genera afición el ciclismo, yo creo que el domingo viene el turno de Gilbert, será el hombre a vencer? Veremos!!!
Dios le oiga buen hombre! felipe gilberto se merece su 4to monumento. será muy muy muy difícil, pero a disfrutar la carrera, gane quien gane!