“Soy muy alto, se me hará difícil competir con Pogacar o Remco”

Una de las grandes promesas del pelotón crece a la sombra de Mathieu Van der Poel. Se trata de Tibor Del Grosso, un potente corredor que en su primera temporada con la formación World Tour ya entregó algunos destellos. Ahora quiere más y apunta a las clásicas que no haga la estrella de Alpecin, mientras que se descarta para las Ardenas. “Soy muy alto, se me hará difícil competir con Pogacar o Remco”.

“Soy muy alto, se me hará difícil competir con Pogacar o Remco”

Del Grosso tuvo sus momentos en 2025, puntualmente en Volta a Catalunya o Dwars door Vlaanderen, donde Neilson Powless humilló a tres hombres de Visma. “Fue una lástima que no pude mantenerme con ellos, pero atrás rodé junto a Pedersen. Y si él no pudo aguantar, entonces no tengo nada de que avergonzarme”, dijo el neerlandés de 22 años a Wieler Revue.

Tibor está encantado con su actual escuadra, donde Mathieu, Pihilipsen o Groves son las caras visibles. “Es genial correr con estos tipos a mi alrededor. Hasta hace poco los miraba por TV. Eso me genera hambre de más gloria”, expresó quien ganara un parcial en el Tour de Turquía, estrenándose como profesional. Aún así, su foco está en las clásicas. “El equipo está armando mi calendario, espero participar en las más importantes”, avisó, pidiendo ser gregario de Van der Poel en dichos eventos.

“Varios corredores se han ido así que creo que el equipo estará interesado en darme una posibilidad. Mathieu no corre todas las clásicas, así que también pienso que puedo ir a alguna como líder o con libertad de buscar mis resultados”, añadió, en referencia a las importantes bajas que representan Quinten Hermans o Gianni Vermeersch. “Será un reto importante estar en Flandes y Roubaix”, completó, deslizando que estará presente allí.

Finalmente, dejó en claro que conoce sus limitaciones al reafirmar que quiere y puede ir por las clásicas adoquinadas, pero que no puede lidiar con los escaladores en las cotas. “Allí veo mi futuro”, tiró, en relación a las piedras. “Soy muy alto, se me hará difícil competir con Pogacar o Remco en las Ardenas”, sentenció Del Grosso, una de las perlas que pule Alpecin en medio de una reestructuración masiva derivada de la demora en encontrar patrocinador.