Thibaut Pinot, el héroe trágico del ciclismo, se retirará esta temporada
Thibaut Pinot realizó un anuncio que a muchos ha cogido por sorpresa: 2023 será su última temporada como ciclista profesional. Con apenas 32 años y una trayectoria cargada de drama, ilusiones y tragos amargos, dirá adiós uno de los ciclistas más queridos por la afición, justamente por ser de los que más a humanizado la práctica.
Por @amatiz12
“Ahora estoy listo para la vida real”, explicó en una entrevista exclusiva para L’Equipe, donde ha confirmado que colgará la bicicleta “antes de lo esperado”. Eso sí, ha preferido en no guardarse el anuncio para que “cuando corra, se sepa que es mi última vez”.
Hace una década, Pinot se presentó como uno de los grandes talentos del ciclismo francés, ganando una etapa en el Tour de France y resistiendo una que otra jornada montañosa ante los favoritos de aquel entonces como Bradley Wiggins, Chris Froome o Vincenzo Nibali.
Sin embargo, curiosamente, su desarrollo se fue dando como el de un rutero capaz con las piernas, pero traicionado por su cabeza y el destino. Muestra de ello, la propia ronda gala, donde vivió sus mayores alegrías y también sus grandes desencantos.
Muchos recordarán aquella edición de 2019, donde tras mostrarse como el hombre más fuerte de los generales, sin rivalizar frente a algún galáctico -era una versión de transición- tuvo que abandonar a falta 2 jornadas por un golpe en la rodilla. Todo había encajado perfecto para que por fin rompiera la maldición francesa en casa, pero como buen héroe trágico, circunstancias ajenas al rendimiento lo privaron de obtener el sueño amarillo, y de paso, retratarle que había dejado pasar ese tren que sólo llega una vez en la vida…
Un brillante escalador, ofensivo cuando estaba en su prime, de esos que garantizaban espectáculo y que con mucha garra lograba jactarse un palmarés respetable que incluye victorias parciales en las tres grandes. Pero a su vez, alguien a quien la desgracia siempre acompañó, uno de esos que no era un consentido del azar y que siempre cuando estaba por lograr cosas importantes, algo le tenía que ocurrir. Otro ejemplo, el Giro de 2018 en el que vio escapar un podio sufrido y trabajado por un virus intestinal.
Esta era moderna orientada por los vatios, tecnología y precisión, convierte a los ciclistas casi que en robots perfectos que sólo se dedican a romper récords. No obstante, Pinot ha sido muy imperfecto, y eso es lo que ha hecho que simpatice con la afición, pues al fin y al cabo, sus desgracias y lo hondo que calaron en él lo hicieron ver como una persona “normal”. Los detalles más humanos son los que conectan.
Y para otra prueba de ello, no hay que retroceder mucho en el tiempo, hace unos cuantos meses en el Tour de los Alpes lloraba por su desdicha y lo complicado que era ganar. Ironías de la vida, 24 horas después, cerraría esa sequía de victorias de 1000 días. Y la inmensa emoción de ganar en una carrera “intrascendente”, humaniza más.
En Lombardía, el monumento que lo vio brillar, se despedirá del ciclismo profesional tras una temporada donde habrá apuntado a otras pruebas de relevancia con el Giro d’Italia, donde tiene cuentas pendientes que podrá saldar antes de decir adiós.
Alejandro Matiz¿Te gusta lo que hacemos? Puedes seguirnos en Instagram y TwitterSúmate en Facebook: Ciclismo Internacional
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Todos los veteranos retirándose y Froome con sus 5 millones y resultados desastrosos ahí relajadito
Hace bien en irse, en Francia las “Tibopinadas” ya se las toman a coña y nadie espera nada de él. No compartí nunca las esperanzas depositadas en un corredor que era la versión francesa del Chava Jiménez. Para más inri el protagonismo en su jornada más exitosa en la cima del Tourmalet le fué robado por el inefable Marc Idiota, perdón..Marc Madiot.
PD: No sigáis insistiendo en “la tecnología” como deus ex machina ..y espantajos similares..para justificar la decadencia o la falta de resultados de..de otros..vamos a dejarlo ahí (de momento). Huele a miedo al futuro y, al menos de momento, los medidores de potencia no mueven las bielas.
Buena tarde. Para mi gusto, esta situación de Pinot demuestra la evolución del ciclismo de alto rendimiento, y a si no lo entendamos muy bien solo los más fuertessss mental y físicamente podrán aguantar tanta presión. En fin Pinot nos regaló varias gestas, las cuales hay que aplaudir.