Un clasicómano que se hizo mayor y no consiguió victorias
Coincidir con genios generacionales hace que las victorias sean escasas. Un clasicómano que se hizo mayor y no consiguió victorias
Un clasicómano que se hizo mayor y no consiguió victorias
Coincidir con genios generacionales hace que las victorias sean escasas para los sobresalientes.
Oliver Naesen reflexiona sobre su carrera, los retos de las clásicas y los cambios en su equipo. Es un clasicómano que se hizo mayor y no consiguió victorias.
A sus 34 años, Oliver Naesen, el veterano belga y especialista en carreras de un día, ha compartido unas reflexiones sinceras sobre su trayectoria, el nivel de competencia al que se ha enfrentado y las expectativas de su equipo de cara a la temporada de clásicas.
“A menudo he estado en posición de terminar con los mejores, pero ¿ganar? Esa es otra historia”, admite Naesen. A lo largo de su carrera, ha competido contra leyendas como Tom Boonen, Peter Sagan, Greg Van Avermaet y Philippe Gilbert, y ahora contra superestrellas modernas como Mathieu van der Poel y Wout van Aert. “Todos ellos son rápidos para rematar. He estado en muchos podios, pero nunca he logrado la victoria. Siempre me he topado con alguien más fuerte”, declaró para IDLProCycling.
Naesen es consciente de la dificultad que supone ganar una clásica en la época actual, donde dominan nombres como Van der Poel: “Nuestra ambición es ganar una clásica, pero cuando Mathieu corre seis de ellas y gana cinco, no queda mucho por lo que competir. Sin mencionar que todos los demás están en fila para lograr esa sexta victoria. Por supuesto, uno espera esa victoria, pero la carrera es algo más que una victoria. Si podemos terminar la primavera con algunos buenos resultados en el podio, podemos decir que ha sido una temporada exitosa. Tenemos que ser honestos al respecto”.
Estrategia y roles más claros
Mirando hacia el futuro, Oliver destaca la necesidad de un enfoque más estructurado y adaptado al equipo: “Necesitamos crear un plan muy claro sobre cómo queremos competir. En los últimos años, a menudo no teníamos asignaciones de roles claras, pero ahora el objetivo es abordar cada carrera con una estrategia que maximice nuestras posibilidades de éxito. Y ese plan debe adaptarse a las fortalezas específicas de cada corredor”, analizó.
Innovación y comodidad: los detalles importan
El veterano también destacó los avances que ha experimentado el equipo, especialmente gracias a su colaboración con Van Rysel, su proveedor de equipamiento: “Hemos dado muchos pasos. Van Rysel nos involucra en todo, desde el desarrollo hasta la I+D (investigación y desarrollo, ndr) y más allá. Son muy exigentes y piden mucho a los ciclistas como yo, pero el resultado es un montón de equipamiento de primera calidad. Este año, tengo especial curiosidad por la nueva ropa que vamos a recibir. Se supone que es increíblemente rápida. Espero que sea tan revolucionaria como la bicicleta que recibimos el año pasado”.
Naesen también menciona cómo los pequeños detalles fuera de la bicicleta también marcan la diferencia: “He oído hablar de otro equipo que vuela a España a las 5:30 de la mañana vía Charleroi, pero nosotros cogemos un avión privado con todo el equipo. Eso marca la diferencia, tanto para la cohesión del equipo como para crear una sensación de calidad. No sé si es necesario, pero todo ayuda. Incluso me preguntan, por ejemplo, si prefiero un asiento en el pasillo o en la ventanilla, así que realmente llega hasta ahí. Cosas así no se me habrían pasado por la cabeza hace 12 o 24 meses. Son pequeños ejemplos, pero aún así”.
Una generación diferente
En la recta final de su carrera, Naesen también se ha percatado de los cambios generacionales dentro del pelotón: “Físicamente, sí, pero en la mesa también. Cuando trabajas con corredores de 18 o 21 años, y la edad media del equipo es de 26, te das cuenta de que a los 34 años ya no eres uno de los más jóvenes. Pero con el paso de los años, la dinámica se mantiene, aunque, por supuesto, se observa una tendencia a que los corredores empiecen cada vez más jóvenes”.
Reflexiones finales
La historia de Oliver Naesen refleja la realidad de muchos ciclistas que, a pesar de su talento y constancia, no siempre alcanzan la gloria de la victoria. Sin embargo, su visión realista, la búsqueda de una mejor estrategia y el enfoque en los detalles del día a día son testimonio de su dedicación y amor por el ciclismo. Aunque el sueño de una gran clásica ganada parezca cada vez más lejano, Naesen sigue siendo un nombre respetado en el mundo del ciclismo, un clasicómano que nunca deja de pelear.
Fernando Estupiñán
Únete al canal de WhatsApp de Ciclismo Internacional
Ingresa a nuestro foro de Telegram
Puedes encontrarnos en Instagram
No te pierdas #CiclismoInterTV en YouTube
¿Te gusta lo que hacemos? síguenos en @CiclismoInter
Súmate en Facebook: Ciclismo Internacional
Copyright © 2012-2024 Ciclismo Internacional. All Rights Reserved