Cada líder del pelotón es un mundo y tal parece Mathieu Van der Poel, aún en todo su esplendor, no es lo que se dice un hombre de hacer amigos. Va a lo suyo, dentro y fuera de la bici, según se desprende de las palabras de uno de sus mejores gregarios en el pasado, hoy escudero de Mads Pedersen, entre los máximos rivales de la actualidad. “Van der Poel nos necesita solo en carrera, el resto del tiempo no le interesa compartir”, dijo Soren Kragh Andersen.
“Van der Poel nos necesita solo en carrera, el resto del tiempo no le interesa compartir”
Kragh Andersen está en Lidl Trek y allí comparte con un viejo conocido como Mads Pedersen, su jefe de filas y algo más. Consultado por Feltet, Soren comparó a Van der Poel con su actual líder y el danés no dejó bien parado a la estrella de Alpecin, para quien se vació en 2023 y 2024. “Mads se involucra más. Nos suma a mí y a otros corredores en su proyecto, sus ideas y entrenamiento. Es una aproximación diferente, explica y desarrolla lo necesario”, reveló.
“Van der Poel nos necesita solo en carrera, el resto del tiempo no le interesa compartir”, lanzó. “El resto del tiempo no es importante para él, que tiene sus propios planes”, continuó. Posiblemente, como casi todos los grandes campeones, el neerlandés sea algo soberbio o quizás solo quiera separar su trabajo de la vida personal por la poco saludable forma de correr que tiene. Más de una vez resaltó que necesita desconectarse para rendir y tener una carrera más longeva. Lo que está a la vista es que los gregarios prefieren siempre una personalidad más cercana.
“Mads es un amigo”, soltó Andersen. “No porque nos conocemos desde jóvenes sino porque es su forma de ser en el equipo. No conozco a nadie aquí que no lo considere un amigo, y eso lo hace un poco diferente”, opinó el doble ganador de etapa en el Tour 2020.
Se cayó del pedestal
Para finalizar, Soren no quiso dejar una sensación de negatividad alrededor de Van der Poel. “Fue especial correr para él por el modo en que corría y aún lo hace. Es muy especial”, remarcó, recordando con particular cariño la Milán San Remo 2023 donde él mismo fue quinto a espaldas de su jefe de filas.
El caso de Andersen es típico, porque le sucedió como muchas veces a los fans con sus ídolos. Olvidan que son humanos y tienen defectos y caen del pedestal. Por caso, bien vale la pena recordar las palabras con las que el hoy ciclista de Lidl Trek llegó en su momento a Alpecin, entusiasmado por servir a la mega estrella que ahora critica: “Es único, de los mejores del mundo, como Pogacar o Evenepoel. Quizás haya cinco corredores con el factor X y él es uno de esos”, aseguró a Ekstra Bladet hace unos años, cuando no lo conocía en persona.
En resumen, ninguno está equivocado. Para empezar, el ciclismo es su trabajo y cada uno es libre de elegir si quiere fraternizar más allá del mismo. Hay que estar en los zapatos de las figuras y saber las presiones a las que están sometidos, aunque del otro lado, quizás los que deben exprimirse en su servicio den algo más si se sienten apreciados.
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