“Ciclistas felices”, ¿el secreto de Jumbo-Visma?

Por @pmpalermo

Dicen que quien trabaja de lo que le gusta en realidad no trabaja. Y si encima que hace lo que ama, lo hace en las mejores condiciones, entonces el rendimiento debería ser superior. Al menos, para algunos en Jumbo-Visma, ese parece ser el secreto del éxito estos últimos años.

En una entrevista con La Provence, Christophe Laporte afirmó que su crecimiento deportivo en el conjunto neerlandés se debe a la felicidad. “Entendieron que para que los corredores ganen tienen que estar felices. Y eso me sienta de maravillas”, indicó.

El francés, 3ro en Omloop y 6to en Kuurne, brilló el año pasado cuando llegó a Jumbo y todo indica que sigue en esa senda. “Las cosas marchan muy bien aquí, son muy humanos y se fijan en que estemos bien. Nada es dejado al azar”, explicó.

Y es posible que así sea en su caso. Los hechos respaldan sus declaraciones. Pero siempre es complicado generalizar, especialmente cuando más de un compañero suyo ha dicho lo contrario. Y no por recibir maltratos, sino por la feroz competencia interna y la falta de oportunidades.

Tobias Foss y Sam Oomen son dos que no esconden su mosqueo y analizan salir de Jumbo a fin de curso, cuando acaban sus contratos. El propio Primoz Roglic no correrá el Tour de France tras la explosión de Jonas Vingegaard y habrá que ver si eso tiene repercusiones a futuro.

Entonces sí, las condiciones son idóneas en términos humanos y de materiales, pero el lugar que a cada uno le toca ocupar no siempre es el anhelado y, a la postre, eso genera desgaste y falta de motivación. Ciclistas felices, sí. Pero además, Laporte debió añadir que -al menos en su caso- ocupando el rol por él esperado.

Pablo Palermo¿Te gusta lo que hacemos? Puedes seguirnos en Instagram y TwitterSúmate en Facebook: Ciclismo Internacional

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