Lefevere, furioso con su bloque de clásicas: “Ahora mismo no tenemos un líder”
Por @pmpalermo
Lejos han quedado en el tiempo -o al menos eso parece- las épocas en las que Quick Step marcaba tendencia en las clásicas de primavera. Los equipos de Lefevere siempre tuvieron varios representantes en la definición de las citas de pavés, pero ahora eso ha cambiado.
El caso más reciente fue en la E3, donde ni siquiera tuvieron un corredor en el top 10, siendo humillados por Wout van Aert, Mathieu van der Poel y Tadej Pogačar. “Es peor que el año pasado”, dijo el mánager. “No hay explicación para esto, y no voy a discutir a los tres de adelante, que son fenómenos y ni deben correr tácticamente. Son tan fuertes que hacen lo que quieren mientras el resto queda flotando atrás”, siguió.
Es cierto, Alaphilippe estaba mal del estómago y las caídas no ayudaron a Senéchal o Ballerini, pero que el mejor corredor haya sido Lampaert -16to a 2:12- fue una bofetada para Lefevere. “El equipo es tan bueno como el líder que tenga. Y ahora mismo no tenemos un líder”, tiró.
“Otros toman la iniciativa y nosotros sufrimos, será difícil cambiar esto. En Gent Wevelgem dirán que aún no estaban recuperados de la E3 o que todavía estaban enfermos”, continuó, criticando a sus hombres. “A mí también me duele el estómago”, agregó Lefevere, al ser consultado por Alaphilippe. “Si estaba enfermo debió decirlo para no correr así, como hizo Declercq”, zanjó el belga, sin piedad.
Pablo Palermo¿Te gusta lo que hacemos? Puedes seguirnos en Instagram y TwitterSúmate en Facebook: Ciclismo Internacional
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La manada de lobos no pasan de unos gatos de porcelana. Y es verdad, no hay un líder pero es que en años anteriores, cualquiera ganaba. Creí que se habían enfocado en Remco, allí el bloque está funcionando muy bien
Debería también mirarse en el espejo y ser autocrítico. Claramente el miércoles pasado en Brugge DePanne tenían superioridad numérica para que Jacobsen disputara el Sprint. En el último ataque ya con el cuarteto formado, Lampaert mira hacia atrás a ver si tira o no, si espera o no a sus compañeros, éstos dudan si cerrar el hueco o no, se nota la indecisión que a lo mejor no vino con rapidez necesaria desde el coche. Ya después seguro sí vino la orden, Ballerini jalonando duro, pero ya fue tarde.