Alaphilippe corrió las clásicas con una fractura debido a la presión de Lefevere: “No lo hice público para que la gente no creyera que ponía excusas”

No es ningún secreto el bajo rendimiento de Julian Alaphilippe los dos últimos años y medio. Tampoco, la enorme presión a la que está sometido por parte de su jefe, Patrick Lefevere, quien lo ha hostigado públicamente una y otra vez.

En ese contexto, no extraña que el corredor haya ido más allá de lo recomendable, compitiendo la campaña de clásicas completa con una fractura. Sí, el francés se lastimó por caídas en Omloop y Strade, con una fractura de fíbula como lesión derivada.

“No lo hice público para que la gente no creyera que ponía excusas”, le contó a Le Parisien. “Sufrí mucho por la caída, incluso moralmente, porque tenía unas piernas increíbles y es una carrera que realmente me encanta”, siguió, en alusión a Strade.

“Desde entonces, tengo dolores en la rodilla izquierda”, reveló “Loulou”, que disputó 11 días más de competición tras la clásica italiana e incluso fue top 10 en San Remo. Lamentablemente, por forzar en citas donde no tenía opciones, se perderá las Ardenas en las que es especialista.

“El equipo médico realizó estudios y descubrieron la fractura. Me dijeron que el dolor no se iría pero que la decisión de seguir o no era mía”, expresó. “Estaba muy motivado, puse mucho trabajo en esto, pero la realidad es que debí frenar para ir a las Ardenas recuperado”, cerró.

Es evidente que Alaphilippe se forzó a si mismo porque, además de ser el primero en reconocer que desde 2021 no carbura, no quiso darle argumentos a su jefe.

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