Otro fallido final: tarjeta amarilla para la moto ¿culpable?

¿De quién fue la culpa? No parece tan claro como en Algarve. Otro fallido final: tarjeta amarilla para la moto ¿culpable?

Búsqueda de responsabilidades

Es la hora de saber de quién fue la responsabilidad. Tras el caos de Algarve donde Filippo Ganna y unos pocos corredores más tomaron la ruta correcta luego de una rotonda mientras el resto del pelotón realizó el sprint en la equivocada, la historia se volvió a repetir el fin de semana pasado en la Clásica de Ardèche 2025 en Francia.

En ambas carreras hubo un denominador común: Romain Grégoire (Groupama) tomó la curva correcta las dos ocasiones. En Algarve quedó segundo detrás de Ganna, resultados que serían luego completamente anulados: la etapa 2 ofició de borrón y cuenta nueva. Mientras tanto, en Ardeché terminó siendo el ganador.

Los criterios de la UCI

Pero aquí viene la diferencia: en Algarve, los comisarios de la UCI anularon los resultados. Aquí los mantuvieron. Nuevamente se observa la inconsistencia en las determinaciones, algo que ya sucede con las tarjetas amarillas.  ¿La posible justificación? Se trata de una carrera de un día y no por etapas, donde la cancelación es mas digerible. Otra es que no se desvió todo el pelotón sino unos pocos ciclistas. Finalmente, no hay que ignorar que se trata de una carrera en Francia donde el ganador terminó siendo francés. Los nacionalismos también juegan un rol.

Pero tal vez la inconsistencia más ridícula sea precisamente en las tarjetas amarillas. En Algarve, donde la responsabilidad fue principalmente de los organizadores con una señalización pobre de la ruta correcta, no hubo -al menos, que sepamos- ninguna sanción o tarjeta pese a que hubo un claro caso donde la situación potencialmente podía poner en peligro a los demás (el criterio bajo el cual se otorgan tarjetas).

En cambio, en Ardèche, donde los ciclistas tuvieron, en los papeles, algo más de culpa -recordemos que es un circuito y el final lo recorrieron varias veces en esa jornada-, la sanción terminó siendo, por el contrario para uno de los miembros de la organización.

Some riders took wrong turn at roundabout inside final km at Faun-Ardeche Classic.pic.twitter.com/Jp8eiSHfDr

— ammattipyöräily (@ammattipyoraily) March 1, 2025

Tarjeta amarilla

En concreto la tarjeta amarilla fue para Christophe Conreau. Se trata del piloto de la moto de televisión que iba por delante del grupo de favoritos cuando tomaron el camino equivocado y por tanto no pudieron luchar por la victoria. Los comisarios de carrera decidieron entonces sancionar al motociclista según el apartado 6.3 del artículo 2.12.007, es decir por “infracción de las disposiciones reglamentarias o directivas relativas a la circulación de vehículos durante la carrera o por no respetar las instrucciones de los comisarios y/o de la organización”.

Al parecer, el conductor de la moto no puso no puso suficiente espacio entre él y los corredores antes de realizar el desvío, no permitiéndoles darse cuenta de que había un marcador que indicaba la ruta correcta. El uso de las motos da para toda una discusión aparte. La cercanía de las mismas a los corredores en fuga otorgándoles rebufo es un aspecto que sigue sin ser tratado por la UCI. Y donde, por ejemplo, más recientemente, jugó un rol en la fuga de Juan Ayuso el domingo en la Drome Classic.

Grégoire defiende su victoria y Mas señala con el dedo a Romo

Pero volviendo a Ardèche, lo cierto es que, a diferencia de Algarve, todos asumieron algo de culpa. El director de la carrera dijo que, si bien puede haber ocurrido un fallo, los corredores también tuvieron su cuota de responsabilidad. “¿Nos hemos equivocado como organización? Tal vez, pero los corredores también se equivocaron. Para Enric Mas (uno de los ciclistas que erró el camino) era su primera participación aquí pero el recorrido es el mismo todos los años. Y también utilizaremos el mismo final en el Campeonato de Europa en octubre. No vamos a cambiar eso”, indicó.

Grégoire defendió su victoria. “No sé qué hicieron a falta de 350 metros, giraron a la derecha cuando ya habíamos pasado por ese punto varias veces. Creo que hubo una ligera falta de lucidez por parte de la cabeza de carrera. Creo que los corredores deberían conocer el recorrido. Hoy hemos pasado tres veces por ahí. No sé quién iba arriba en ese momento. Yo iba en torno al 6º-7º puesto. Ni siquiera pensé en ello. Afortunadamente, estaba alerta, sabía que estaba delante. Por supuesto, es un poco extraño no poder hacer el esprint que esperabas. Pero es así, forma parte de la competición”, afirmó.

En tanto, Enric Mas echó un poco la culpa a su compañero de equipo, Javier Romo. “Sinceramente, íbamos a toda velocidad, seguí a mi compañero Romo, que lideraba el grupo en ese momento. La moto que nos abrió el paso estaba muy cerca y la seguimos sin dudarlo. Cuando vi que los coches venían en dirección contraria, me dije que habíamos hecho algo mal“, afirmó el español en declaraciones citadas por L`Equipe.

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