
La etapa de cierre de Vuelta a España no pudo ser más representativa de la carrera de este año: las masivas protestas pro-Palestina en Madrid obligaron a la neutralización y posterior cancelación de la jornada a 58 kilómetros de meta. Los manifestantes reclaman contra la presencia de Israel – Premier-Tech en el pelotón en medio del genocidio de Israel en Gaza.
Protestas contra IPT
Las protestas multitudinarias en La Vuelta se hicieron presentes en varias jornadas, obligando a la neutralización sin ganador de etapa en la etapa 10 a Bilbao, y la reducción a 8 kilómetros de la meta original en la decimosexta etapa, en la cual si hubo un ganador (Egan Bernal). La etapa final de Madrid fue ligeramente modificada antes de partir, eliminando el paso por las localidades de San Sebastián de los Reyes y Alcobendas por manifestaciones.
De los brindis a la tensión
Los primeros kilómetros tuvieron el guion protocolario habitual en la procesión de Madrid con fotos de Vingegaard con el resto de Visma, bridones y fotografías. Pero a falta de 58 kilómetros de meta, en el centro de la ciudad, un grupo de manifestantes saltó a la carretera con una pancarta en la que se podía leer ‘Abajo el Estado de Israel’ al grito de ‘No pasarán’ y se detenía la carrera por seguridad. No hubo incidentes contra los ciclistas. Tras las conversaciones entre los corredores, los comisarios y la organización de la carrera, el pelotón avanzó lentamente hacia el circuito final, pero poco después se detuvo por completo ante el agravamiento de la invasión en las calles, pese al megaoperativo policial. Simplemente no hay forma que las fuerzas policiales controlen miles de personas en un circuito.
No habrá podio
La organización de la carrera no hizo ningún comunicado formal, pero la etapa fue suspendida y los corredores se dirigieron a los autobuses de sus equipos, señalando que la Vuelta había llegado a su fin. Tampoco habrá ceremonia de podio por movivos de seguridad.
Jonas Vingegaard (Visma) de esta forma, se corona oficialmente como ganador de La Vuelta 2025. Una triste desenlace para una carrera que más allá de las protestas, deja muchas cuestiones en el “debe” en cuanto a aspectos como el recorrido. A la UCI, en tanto, queda en manos la tarea de realizar las acciones correspondientes que no tomó hasta el momento.. A diferencia de lo ocurrido pocos días después de la invasión rusa en Ucrania, ni el Comité Olímpico Internacional (COI) ni la Unión Ciclística Internacional (UCI) tomaron una decisión al respecto, por lo que las manifestaciones no se hicieron esperar ante una escuadra que realiza prácticas de sportwashing.
Esta es la primera vez que una gran vuelta ve anulada su etapa final por manifestantes políticos desde la Vuelta a España en 1978 en San Sebastián.
Una primera manifestación propalestina antes de entrar al circuito de Madrid obliga a parar la carrera.
La invasión del circuito complica que #LaVuelta25 pueda terminar en Madrid.
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‼️#LaVuelta PROTESTAS EN MADRID
️ Aplausos en la cabecera de la manifestación tras conocerse que se suspende definitivamente La Vuelta
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— Carrusel Deportivo (@carrusel) September 14, 2025
Los manifestantes propalestina ocupan parte de la calle de Gran Vía, recorrido que forma parte de La Vuelta a España y por el que se espera que pasen los ciclistas.https://t.co/Xk35b2tIUZ pic.twitter.com/Zva1TgZOrf
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