El ascenso a la máxima categoría del ciclismo, el WorldTour, no se trata de un camino fácil y automático. Por caso, dos escuadras que recibieron una fuerte inversión y que fueron creadas en los últimos años como Tudor y Q36.5, deberán esperar al próximo ciclo que iniciará en 2029, pese a haber contratado figuras como Tom Pidcock, Julian Alaphilippe y Marc Hirschi. Profundidad, puntos UCI y la posibilidad de generar talento propio, más allá de figuras que hagan cartel y que permitan acceder a invitaciones, son prácticamente requisitos esenciales que no se hacen de la noche a la mañana. Sin embargo, hay tres escuadras que hoy en día se ganaron su lugar en el WorldTour que tuvieron temporadas impresionantes que allanaron su llegada a la máxima categoría, superando incluso a varios de los equipos asentados de esta última.
Alpecin (2021):

De la mano de Mathieu van der Poel, el ascenso del equipo de los hermanos Roodhoft –inicialmente de ciclocross y no de ruta- fue meteórico. Recién se convirtieron en un ProTeam de segunda división en 2019 tras casi 10 años dedicándose solo a la disciplina del barro y ya, en el primer ciclo UCI que pudieron hacerlo, ascendieron al WorldTour para el año 2023. Pero fue 2021 la temporada clave del equipo. Ese año no solo contaban con Mathieu van der Poel y Tim Merlier, sino que incorporaron a Jasper Philipsen, proveniente del UAE.
Sumaron 33 victorias y un sexto puesto en el ranking UCI, lo cual les dio la posibilidad de aspirar a invitaciones automáticas al año siguiente. Van der Poel atacó en Piazza del Campo y se llevó Strade Bianche, antes de terminar en el podio del Tour de Flandes y París-Roubaix. En tanto, Philipsen y Merlier ganaron Scheldeprijs y Bredene Koksijde Classic, respectivamente. El entonces Alpecin-Fenix no había nunca corrido una gran vuelta y lo empezaron a hacer en ese 2021 con gran éxito. La segunda etapa –la primera en ruta tras la crono inicial- fue para Merlier.
La organización del Tour no dudó en invitar a la escuadra, dónde Van der Poel atacó sobre el final del Mur de Bretagne, llevándose la etapa y la malla amarilla en lo que fue una victoria emocional para el neerlandés. Su abuelo, Raymond Poulidor, no solo nunca pudo ganar el Tour pese a sus ocho podios, sino que tampoco pudo llevar nunca la camiseta de líder.
Merlier ganaría la etapa siguiente, mientras que Philpsen conquistaría dos jornadas de La Vuelta. En total, 26 de las 33 victorias vendrían del trío de Van der Poel, Merlier y Philipsen con un rol clave de los trenes de lanzamiento y, en el caso de las clásicas, de Gianni Vermeersch, mano derecha de Van der Poel que ese año finalizó séptimo en el Tour de Flandes y que se marchará a Red Bull – Bora para la temporada 2026. Y después, todo es historia conocida: el éxito de Alpecin continuó de forma grandilocuente.
Lotto (2024):

Los malos manejos de la dirigencia y la dependencia en un corredor irregular como Caleb Ewan terminaron hundiendo al Lotto, que terminó descendiendo a fines de 2022. Luego empezó un periodo de reconstrucción donde tres figuras de su cantera llevarían al equipo de nuevo al ascenso para este 2026: Lennert van Eetvelt, Maxim van Gils y Arnaud de Lie. Lo cual no es de sorprender, considerando que Lotto tiene una de las mejores tasas de éxito entre escuadras de desarrollo del pelotón.
Fue 2024 el año donde eso se mostró más con 25 victorias, 9 a nivel WorldTour incluyendo triunfos en las generales de UAE Tour y Tour de Guangxi con Van Eetvelt. Para dar una muestra de cómo se destacó Lotto, tanto Van Gils como De Lie se metieron entre los quince primeros del ranking mundial de corredores. En el caso de De Lie, tuvo siete victorias, incluyendo el Campeonato Nacional Belga, mientras que Van Gils tuvo un verdadero año de exhibición: tercero en Strade Bianche y Flecha Valona, cuarto en Lieja y séptimo en Milano-San Remo. Además, ganó carreras como la Eschborn-Frankfurt.
El equipo belga también tuvo éxitos en grandes vueltas con una victoria aún fuga de Victor Campenaerts en la etapa 18 del Tour de France, el primer triunfo en el Tour desde 2020. Sin embargo, el éxito tiene un costo: sin sponsors (Dstny se retiró como co-patrocinador a fines de 2024), no pudo retener ni a Campenaerts ni a Van Gils que se fueron a Visma y a Red Bull, respectivamente.
2025 fue un año más apagado para Lotto y, por si solo, no hubiera alcanzado para ascender. Van Eetvelt estuvo atravesado por la mala suerte y las lesiones que le impidieron completar una gran vuelta, mientras que De Lie inició el año con el pie torcido hasta que se logró recuperar desde mediados de años y terminó el año a lo grande. La fusión con Intermarché estuvo lejos de ser ordenada y ahora el desafío es volver a tener los éxitos que hubo en 2024, tras haber logrado el ascenso al WorldTour.
Uno-X (2025)

Al iniciar 2025, nadie se pensaba que Uno-X sería parte del WorldTour en 2026. Ni siquiera ellos mismos. Pero una temporada soñada junto con algunos hechos del destino (como la fusión Intermarché – Lotto que liberó un lugar en el WorldTour) hicieron que el equipo se pueda codear con los mejores.
2025 fue el mejor año para el equipo escandinavo. Soren Waerenskjold sorprendió con una victoria en Omloop en marzo, la primera victoria de la historia del equipo en una clásica WorldTour. La formación siguió sumando puntos y victorias en todo el calendario incluyendo el Circuito Franco-Belga y el Muur Classic Geraardbergen ganados por Jonas Abrahamsen, las dos etapas y la general de Waerenksjold en el Tour de Alemania o la victoria en fuga de Fredik Dversnes en el Tirreno-Adriático.
Pero fue en el Critérium du Dauphiné y en el Tour de France donde la escuadra se mostró al mundo entero. En la primera competencia, Johannessen terminó quinto en la general e incluso la escuadra entera se puso al frente en la última etapa para intentar tomar tiempo a sus rivales directos.Luego, en el Tour de France –el tercero del equipo luego de ser invitados por primera vez en 2023-, Johannessen terminó con un sorprendente sexto puesto, mientras que lograron ganar por primera vez en una etapa con Jonas Abrahamssen, corredor que se había roto la clavícula apenas 17 días antes de la salida en Lille. Fueron 23 victorias en 2025 y, tomando el ranking de 2025, finalizaron undécimos en el año, por encima de varios equipos WorldTour.
Ahora el equipo se enfrentará por primera vez al desafío de estar en la primera división, lo cual implica, entre otros aspectos, estar obligados de ir a las tres grandes. Sin embargo, hay confianza para fortalecerse. Como objetivos ya se pusieron varios. Terminar en el top 10 del Giro d’Italia con Johannes Kulset, acercarse al podio del Tour con Tobias Johannessen, mejorar la performance en las clásicas especialmente en las Ardenas donde todavía no pudieron impresionar, y fortalecerse en las clásicas de Pavé.
“Sabemos que será un gran reto con aún más eventos del WorldTour. Pero con el sólido grupo de entrenadores y cuerpo técnico que rodea a nuestros ciclistas, creemos que podemos apoyarlos para que juntos alcancen sus sueños y metas”, explicó en un comunicado, Gabriel Rasch, jefe del equipo masculino. Para más detalles sobre como quedaron las invitaciones y los equipos de primera y segunda división para 2026, aquí puedes acceder a un artículo completo.
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