Por @pmpalermo

El ciclismo no trata sólo de las montañas y desde esta redacción siempre le damos valor a los velocistas. Los mismos deben esperar horas para poder mostrar su capacidad durante pocos segundos y, muchas veces, sin siquiera conseguirlo.

Foto: ANSA

Por eso, y en previsión de una edición del Tour con mucho terreno para ellos, toca analizar el lote de sprinters. Vale la pena mencionar que algunos no son embaladores puros, aunque su versatilidad bien les vale un hueco en este apartado.

Marcel Kittel luce como el sprinter puro más potente. Sin embargo, no ha conseguido volver a ser el de sus mejores años en las grandes citas, sufriendo lo indecible para celebrar en la edición pasada. En 2017 acumula ocho festejos, aunque la mitad fueron en citas mediocres como Dubai y Abu Dhabi.

Su tren es importante, quizás el más fuerte en liza, con Trentin y Sabatini de últimos hombres, y Stybar y Gilbert dando una mano en los kilómetros conclusivos. En los papeles, el alemán tiene todo lo necesario para hegemonizar las próximas semanas.

Suena curioso, pero Peter Sagan tendrá un tren completo a su disposición: Bodnar, Burghardt, Juraj Sagan, McCarthy y Selig. No lo tuvo antes y casi que no lo necesitó, conformándose con ingresar en el top 10 cada día y luego sumando más puntos en jornadas duras, donde además se hizo con varias victorias.

Si algún velocista dominara ganando tres o cuatro etapas, pondría en entredicho el maillot verde que ya es propiedad del eslovaco, motivo por el que, además de lucirse en jornadas duras, “Peto” tendría que pujar por las volatas tradicionales. Con el bloque que le montaron, tiene enormes chances de lograrlo.

Andre Greipel acude con cuatro conquistas entre las que destacan una en el Giro y otra en París-Niza, en ambas ocasiones sin un tren definido. Bak, Hansen, Sieberg y Roelandts serán su laderos, y eso es un grupo respetable.

Los dos primeros pueden hacerse cargo en los últimos 5 km, mientras que Roelandts tendrá la difícil tarea de lanzar al “Gorila”, función que no ha ocupado en mucho tiempo. La salida de Henderson fue un error que podrían pagar caro aquí.

El historial de Greipel en el Tour lo respalda (ha obtenido al menos un triunfo desde 2011), todavía es uno de los más potentes y nunca debe ser descontado, pero no es un dato menor que es de los que necesita un último hombre que lo guíe y, salvo que Roelandts descolle, le costará mucho alzar los brazos.

Julio se anticipa difícil para John Degenkolb. El germano nunca volvió a ser el que era antes de su accidente. Eso, sumado a que casi todo Trek-Segafredo se vaciará por Contador, lo deja frente al difícil reto de reencontrarse a sí mismo casi sin auxilio.

Apenas Gogl y De Kort le echarán un cable, sin olvidar que tiene más opciones en días y/o finales exigentes, que justamente no abundan.

Arnaud Démare dispone de siete hombres a su servicio. Las adiciones de Guarnieri y Cimolai no sólo sumaron números al tren, sino velocidad en puestos clave. El galo está obligado a ganar y tiene que hacerlo en cantidad.

Arriba muy fino y con el bloque más sólido. Eso será una presión extra, que se quitará si levanta rápidamente los brazos. 2017 ha sido uno de sus años más prolíficos, con siete dianas entre las que sobresalen la de París-Niza, Dauphiné y el campeonato nacional.

Michael Matthews dispone de una alineación íntegra a su servicio y pocas jornadas reales para su lucimiento. Sin un líder para la general (Barguil llega de milagro), es posible que la escuadra decida que “Bling” regrese a sus años de sprinter puro y se meta en todas las volatas. Caso contrario, el flamante campeón neerlandés Ramon Sinkeldam ocupará ese rol.

Mark Cavendish estuvo mermado gran parte del año por una mononucleosis y volvió al ruedo recién en junio. Lo más lógico es que eche en falta kilómetros en las piernas y no esté en condiciones de disputar, dejando esa responsabilidad a Edvald Boasson Hagen.

Con el correr de las jornadas debería ir a más y, quizás, “Cav” logre asomar en los compases conclusivos del evento. Si algo enseñó el año pasado es que nunca debe ser subestimado y por algo es un hombre récord aquí.

Ben Swift mostró muy buena forma en Dauphiné y el nacional británico luego de meses sumido en el anonimato. Sin embargo, estará por su cuenta y es posible que busque alguna escapada, porque al igual que sucede con Colbrelli o Matthews, los días óptimos para luchar por algo concreto son escasos.

Alexander Kristoff es uno de los velocistas más ganadores del año con seis dianas, aunque cuatro las obtuvo en Bességes y Omán, rondas preparatorias de nivel secundario. El año pasado adujo a problemas en su preparación la ausencia de éxitos en la Grande Boucle, veremos si logró corregir eso.

No es un dato menor que perdió a Guarnieri en el invierno y, posiblemente por sus cortocircuitos con la directiva de Katusha, lo privaron de Morkov para el Tour. Haller es un gran lanzador, pero insuficiente para oponer resistencia a los rivales. Una buena táctica sería que el austríaco lo coloque a rueda de un tren dominante, aunque el noruego deberá remontar desde atrás y su año no invita a ser optimistas con el resultado.

Dylan Groenewegen saldrá con enormes expectativas en torno a su figura. LottoNL Jumbo ha invertido tiempo y dinero en su joven estrella de los sprints, incrementando el número de lanzadores y modificando el modo de trabajo de pretemporada de cara a generar mayor cohesión.

El holandés tiene un triunfo en las piernas, aunque debe confirmar el salto de nivel, porque el Tour es otro mundo y sobran los ejemplos de promisorios atletas que no pudieron completar su evolución.

Sonny Colbrelli está en una situación similar a la de Matthews, con la salvedad de que su tren no es potente. Deberá ganarse el salario en días duros, que no abundan.

Parece increíble, pero Nacer Bouhanni nunca logra arrancar el Tour 100% sano. Aún padece de su caída en el Tour de Yorkshire, aunque es un corredor rocoso y muy talentoso. Será crucial para su éxito que Claeys, Lemoine y Laporte brillen en todo su esplendor.

El ex boxeador es de los más veloces cuando está pletórico, posee una técnica envidiable y los de rojo estarán al 100% para él, tratando de quebrar una sequía que se remonta a 2008. En la previa, las cosas no pintan bien para la histórica estructura.

Dan McLay fue una de las revelaciones del Tour pasado, con cuatro top 10 y excelentes actuaciones. Su forma fue clave, así como también los caóticos embalajes, ya que no hubo un cuadro dominador que impusiera el orden. Es incierto saber qué hará el británico, aunque sus resultados estacionales no son para ilusionarse.

Andrea Pasqualon y Dion Smith serán los responsables de defender el honor de Wanty Groupe Gobert en los embalajes. Han enseñado cosas interesantes antes, pero esto es otro nivel y, salvo que alguno de ellos sea la próxima gran aparición de la velocidad, dudamos que logren algo más que un top 10 ocasional.

Direct Energie dejó en casa a Bryan Coquard debido a que el veloz pedalista anunció que dejará la estructura el año entrante. Eso abre la puerta a Thomas Boudat y Adrien Petit, con el primero como la baza más factible y el segundo de alternativa, sobre todo en días ventosos.

Pronósticos

Peter Sagan brillará como es habitual, es decir, sumando puntos por doquier y pujando por la victoria en parciales exigentes. Eso sí, no le será tan sencillo, con gente como Gilbert, Van Avermaet, Matthews, Colbrelli o Swift merodeando.

Adicionalmente, con todo un tren a su servicio y el riesgo siempre latente de que un embalador puro destaque, no sorprendería que el campeón mundial esté más activo en los sprints tradicionales.

En los mismos, Kittel, Démare y Greipel parten como los hombres a vencer, con Groenewegen, Bouhanni, Kristoff y el citado Sagan un peldaño por detrás. De entre todos estos saldrán la mayoría de los vencedores.

De tener que aventurar un nombre, creemos que Quick-Step funcionará mejor que antaño y Kittel recolectará en cantidad.

SECCIÓN TOUR DE FRANCE

Pablo Martín Palermo

¿Te gusta lo que hacemos? seguínos en @CiclismoInter

Sumate en facebook: Ciclismo Internacional

Copyright © 2012-2017 Ciclismo Internacional. All Rights Reserved

4 pensamientos sobre “Los sprinters del Tour de France 2017

  1. No veis a Impey metiendose en los sprints?? Y sobre arndt…no creeis q seria el y no sinkeldam el se pudiera meter en los sprint llanos del sunweb?? Gracias por los analisis,sois unos cracks!

    1. Podemos equivocarnos, pero creemos que los tiempos de Impey colándose en sprints masivos ya pasaron. Eso, si tiene la chance, porque con tanto gallo en Orica, es probable que deba trabajar mucho.
      Arndt es una opción, pero a nuestro parecer, Sinkeldam arriba más fino y el equipo ha incrementado la confianza en él. Arndt tuvo muchas chances que no aprovechó antes…

Los comentarios están cerrados.

                      
close
Facebook IconTwitter IconMi BlogMi Blog

Descubre más desde Ciclismo Internacional

Suscríbete ahora para seguir leyendo y obtener acceso al archivo completo.

Seguir leyendo