Van der Poel: “Decidí seguir e intentar llegar solo, a todo o nada”

Por Oscar Trujillo Marín

Mathieu van der Poel se ha llevado el BinckBanck Tour 2020 a su estilo. Es decir, a lo grande: parece que el holandés fuera incapaz de vencer si no media épica y angustioso espectáculo de por medio que termina en éxtasis.

Hoy con un ataque lejano junto a Senechal (Deceuninck)  -a más de 70 km de meta- el genial neerlandés  consiguió llegar a los fugados que marchaban dos minutos adelante del lote. Tiró de ellos un rato hasta fundirlos. Luego se lanzó en solitario a hacer  los últimos 50 kms, manteniéndole el pulso a sus desesperados perseguidores (entre los que estaban algunos de los mejores clasicómanos del mundo) en un parcial que tenía el mejor estilo de la temporada de clásicas plagadas de cortos pero duros repechos. Así lo relató el mismo corredor para el canal belga Sporza.

“Es realmente increíble ganar el BinckBank Tour de esta manera”, dijo el campeón holandés. “No esperaba esto. De hecho, pensé que había atacado muy lejos y me iban a pillar”. Cabe recordar que en el Muur van Geraardsbergen, con 50 km aún por delante, se marchó en solitario. En ese momento el grupo principal estaba a solo un minuto.

“Haber partido del lote junto a Senechal fue bueno, nos entendimos bien. Cuando logramos llegarle a los punteros ahí me esperaba (De Bondt, su compañero de equipo N.d.r). Le dije que aceleraría en el siguiente pasaje del muro, por suerte nos salió bien”, relató el nieto de Poulidor, aunque fue su impresionante clase la que hizo posible mantener por más de una hora un emocionante pulso con tanta gente especialista en ese terreno persiguiendo atrás. Así lo contó Mathieu: “Fui el primero en aparecer en el Muro. Por un momento dudé de qué hacer, aún quedaba un largo camino hasta la meta. Aun así, decidí seguir e intentar llegar solo, me llevaría todo o nada”.

A 15 km de meta una temible cuarteta le pisaba los talones al líder del Alpecin-Fenix, su ventaja de más de un minuto se había esfumado a solo 25 segundos por la perfecta sincronización de sus rivales con Soren Kragh Andersen, (el danés se jugaba la general e iba delante en esa clasificación que Mathieu) Stefan Küng, Sonny Colbrelli y Oliver Naesen. La cacería parecía inminente y de ser alcanzado, el campeón sería Kragh Andersen.

“Fue muy difícil. Mi suerte hoy al final ha sido que no miré atrás, porque los había esperado varias veces y no acababan de llegarme. En términos de sufrimiento, este viaje quizás esté todavía por encima de mi esfuerzo en la Amstel Gold Race. Esta es una de mis victorias más difíciles”

Finalmente con la luz de un puñado de segundos a sus adversarios, más la bonificación del km de oro y la de línea de meta le fue suficiente para superar al danés Kragh Andersen y llevarse un triunfo de esos que no se olvidan. Gracias a este ambicioso corredor hemos visto una de las jornadas de ciclismo más bonitas de toda la temporada.

Oscar Trujillo Marín¿Te gusta lo que hacemos? seguínos en Instagram y TwitterSumate en facebook: Ciclismo Internacional

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