Análisis: Antecedentes de los aspirantes al Tour en el adoquín
Por @pmpalermo
Desde que se anunció el recorrido del Tour, al margen de las siempre atrayentes jornadas de montaña, hay un parcial que quita el sueño a todos. Se trata de la etapa 9, la que llevará a los pedalistas a través de los 15 sectores adoquinados dispuestos entre Arras y Roubaix.
Hecho el repaso de los reconocimientos realizados por las figuras, es bueno recordar el pasado de estos atletas en el pavés con vistas de anticipar un poco más qué esperar de cada uno.
Lo primero a señalar es que la Grande Boucle ha introducido adoquines más recientemente en las ediciones de 2015, 2014, 2010 y 2004. Por eso, los máximos favoritos al trono de Froome sólo tuvieron las dos últimas experiencias. Incluso Nibali, algo más veterano, faltó a la cita en 2010 y, obviamente, ninguno estuvo en 2004, la recordada jornada en la que Ibán Mayo dijo adiós a sus opciones.
Partiendo de esa premisa, el primer punto a señalar es el clima. Mucho se habló de la distancia y la cantidad de adoquines, pero contrario al pensamiento popular, será la meteorología la que incline la balanza. En 2014 se transitaron escasos 155.5 kilómetros entre Ypres y Arenberg Porte du Hainaut, con nueve sectores en los que Nibali hizo estragos (junto a Fuglsang, ojo con él) bajo la lluvia y comenzó a ganar el Tour.
A sus espaldas reinó el caos, y cada uno hizo lo que pudo por limitar la sangría. De los hoy considerados capos, Porte y Thomas arribaron a 1:52 y 2 minutos respectivamente, corriendo libres debido al abandono de Froome justo antes del primer sector adoquinado. A 2:09, todos juntos, Dumoulin, Pinot, Valverde y Bardet.
Por contrapartida, en 2015 fueron 223.5 kilómetros entre Seraing y Cambrai, con siete sectores. Ese día, los gallos superaron el escollo sin problemas, y hasta se vieron ataques de Froome y Thomas. Nairo Quintana apretó los dientes en algún punto, salvando la jornada. No eran figuras ni líderes, pero los Yates, Majka, Poels, Jungels y Porte se dejaron una minutada en medio del polvo.
A modo anecdótico y referencial, decir que en 2010 Fränk Schleck no llegó a destino, o que su hermano Andy endosó 1:13 a Contador valiéndose del talento de Cancellara. Armstrong pinchó e ingresó a 2:08 luego de amenazar largamente con usufructuar el parcial, claro ejemplo de lo impredecible del mismo.
Es evidente que los delgados escaladores no se encuentran en su ambiente cuando rebotan en el pavés, pero algunos tienen atributos suficientes como para obtener réditos de dicho parcial, haciendo algo más que sobrevivir.
Por razones obvias, Vincenzo Nibali es el primer apuntado. Aunque se hizo con una Grande Boucle sin Froome y Contador en París, inició su periplo hacia la cima en las piedras, haciendo valer su técnica, ayudado por Fuglsang -ex biker-, quien ahora será jefe de filas de Astana.
Alejandro Valverde es otro con una capacidad importante para cualquier tipo de superficie. Su más actual performance en Dwars door Vlaanderen, bajo condiciones climáticas tremendas, es una muestra de lo que el murciano puede hacer. Será muy interesante ver cuál es el enfoque de Movistar antes, durante y después de ese día, porque, quizás, el “Bala” quede en una posición más favorable que las de Landa y Quintana.
Geraint Thomas es un nombre a considerar. Campeón de la E3 Harelbeke 2015, acumula lauros positivos en las fracciones adoquinadas del Tour: 2° en 2010, 21° en 2014 y 22° en 2015.
¿Qué esperar del resto?
No es ningún secreto que intentarán aguantar. Los gregarios pueden ser cruciales, especialmente los clasicómanos. En ese sentido, Movistar Team puede darse el lujo de alinear a gente que lo ha hecho bien en estas lides como Erviti (9° en una Roubaix), Rojas (15° en el pavé del Tour 2010), Amador y Bennati.
Froome dispondrá de Thomas, Moscon o Kwiatkowski; Bardet, de Oliver Naesen y Dillier; Porte, de Van Avermaet; Urán de Vanmarcke; Adam Yates de Hayman y Durbridge, y así casi todos. Pero ha quedado expuesto que el clima y la fortuna serán claves, y aún con un ejército de domésticos y los mejores materiales, se puede perder el título ese día.
En consecuencia, la primera misión pasa por acabar en una pieza y la segunda por ceder el menor tiempo posible o, directamente, no hacerlo. Fácil decirlo, no concretarlo, especialmente con el intangible climático siempre merodeando por encima de sus cabezas.
Pablo Martín Palermo
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Todos los equipos tienen al menos dos gregarios que intentarán llevar a los capos en el pave. El unico es Movistar que no se cómo van a repartir dos gregarios para tres capos
Quisiera saber si tienen antecedentes de Uran y Zakarin en el pave.
De rigo lo único que vi en pave fue la etapa de el 2015 pero ese dia no paso nada llegaron todos los gallos juntos, recuerdo q esa etapa la gano Tony Martín con un ataque tardío. Vale mencionar que ese día el clima no influyo a diferencia de el 2014 que fue un dia de perros.
Voy a tener el ojo colocado en Roglic por su fortaleza y en Bernal que lo conozco desde mtb y aunque en bici totalmente diferente a los 17 ya era in fenómeno para rodar en las piedras. Si puede llegar a menos de tres minutos yo diría que lo ha hecho de maravilla.
Aqui sacara ventaja el tiburon
Por que no comentas los tours del 2016 y 2017.
Como bien dice Pablo estas etapas de
pavé son impredecibles, cualquier cosa puede pasar. Complementando el interesante artículo suyo en el 2015 la cosa fue así: Ganó Tony Martin. Froome, Thomas, Nibali, Quintana, Sagan, Urán, Valverde, Purito, Bardet y Contador llegaron todos juntos a 3s. Pinot perdió más de 3 min., Adam Yates perdió más de 5 minutos, mientras que Bob Jungles y Richie Porte perdieron cerca de 17 minutos.
Considero que los tres capos de movistar serán un solo grupo a favor de ellos mismos y podrán sortear sin mucha pérdida con los otros capos …
Me llamaimagino la antencion que en el articulo no mencione a sagan ganador de la ultima clasica