Conclusiones etapa 3-Tour de Francia 2014

Por @pmpalermo

El público Inglés maravilla: tres días de competencia en territorio británico dejaron en claro el nivel de popularidad que goza el deporte pedal en la isla, ya que se calcula que más de 6 millones de personas presenciaron el paso de la prueba a los costados de la ruta en ese lapso. 

Las grandes vueltas, y sobre todo el Tour, suelen atraer a los fanáticos, pero por lo general éstos se hacen notar en las etapas de alta montaña y no en el llano, como sucedió los días pasados Gran Bretaña.

Es que incluso hoy lunes, día laboral, la populosa capital bullía de gente ávida por ver durante unos segundos el tránsito de la caravana multicolor y eso completó un panorama inolvidable que invita a la organización a regresar en el futuro puesto que pocas veces hubo un marco tan impresionante en un inicio extranjero de alguna de las grandes rondas.

Sin montaña, ya hubo diferencias: por lo general los grandes favoritos dirimen sus diferencias en la montaña o la crono, pero el complicado y nervioso comienzo en Inglaterra ya marcó algunos huecos entre los gallos.

Si bien no se trata de Froome, Contador, Valverde (entregaron apenas 2″ a Nibali), algunos nombres importantes y otros aspirantes al top 10 cedieron valiosos segundos: König, Pinot, Roche, Ten Dam, F. Schleck, Horner, Frank y Rolland arribaron a 16″.

Peor suerte corrieron Navarro (35″), Andy Schleck (1´19″), Spilak (4´34″), Chavanel (8´40″), Voeckler (10´31″), Purito Rodríguez (14´48″), Taaramäe (15´39″) y Majka (17´09″).

Como dijimos, no todos apuntan a la general, pero siempre es interesante saber cuánto pierden estos atletas porque su talento no les permitirá pasar inadvertidos y, por ejemplo, la gran brecha de Rodríguez con el amarillo le permitiría libertad de acción en alguna jornada montañosa si encuentra su forma más adelante.

Kittel no tiene rival: el gigante alemán ya se reveló en 2013 como el mejor velocistas del Tour y del mundo, pero por si hiciera falta refrendarlo,esta temporada mantuvo ese camino, arrasando durante el breve lapso que disputó del Giro y haciendo lo propio en el comienzo de la ronda gala.

El de Giant metió el miedo  a los rivales en la jornada inicial cuando se vistió de amarillo en una llegada que, en la previa, era demasiado dura para él. Pese a ello el portentoso atleta se mantuvo a rueda de su tren y no encontró oposición para quedarse con la gloria.

Lo mismo sucedió en Londres, cuando se limitó a rodar a rueda de sus compañeros que lo dejaron en una posición inmejorable para sumar otra diana, la segunda en la presente edición y la sexta en su historial en Francia.

Bretagne Séché, el equipo más combativo: la pequeña escuadra francesa hizo honor a la invitación recibida y, por ahora,fue la única que metió siempre un pedalista en la fuga diaria.

Es habitual que los conjuntos con wild card traten de honrar el evento con sus escapadas, pero en el caso de los de blanco, la baja de su líder Sepúlveda los obliga todavía más y por eso, no fallaron.

La jornada inaugural fue testigo de la intentona de Benoit Jarrier, en tanto que la complicada etapa siguiente contó con el valiente Armindo Fonseca. Camino a Londres fue Bideau quién se sacrificó durante 150 kilómetros, aún sabiendo que no tenía ninguna oportunidad.

Muchos dirán que este es el trabajo y el objetivo de los Por Continentales, pero no por ello es menos destacable lo realizado, algo que ni Cofidis, IAM y NetApp consiguieron.

Nibali, ¿de amarillo hasta el pavé?: obviamente que ganar una etapa y ser líder de la Grande Bouclé es un logro al alcance de pocos, pero aquellos que aspiran a quedarse con el evento deben llegar frescos a la semana final y parte vital en ese objetivo es no gastar energías innecesarias en el comienzo.

Por ello, el italiano no vería con malos ojos entregar la distintiva prenda que lo caracteriza como puntero y el escenario ideal podría ser el quinto parcial, el día que el pelotón se encuentre con el pavé de la París Roubaix.

Allí, el Tiburón tendría que mantenerse a la par de sus contrincantes en todo momento a no ser que encuentre alguna opción de aumentar la brecha, algo que no parece probable ni oportuno, ya que resta mucha carrera por delante y la montaña real no llegará sino hasta el noveno día.

Además, con Sagan y Van Avermaet a sus espaldas en la general, quiera o no el campeón italiano, es más que probable que alguno de esos dos corredores lo reemplace en su privilegiada posición, ya que se desenvuelven mucho mejor que él en el adoquín.

Coquard no tiene techo: el joven velocista francés de Europcar regaló muestras de su talento en los dos embalajes masivos del Tour aún en presencia de los grandes y experimentados monstruos de la especialidad.

Con un estilo diferente (sin lanzadores) y una pequeña humanidad más propia de escalador que de velocista, el galo se codeó sin temor contra Kittel, Greipel, Sagan y compañía, clasificando 4º en Harrogate y Londres.

Si se tienen en cuenta las bajas de Cavendish y Modolo, el panorama se abre todavía más para este fantástico atleta, que podría ser una de las sorpresas del 101º Tour si lo descuidan, porque poco tiene que envidiar a sus colegas.

Pablo Martín Palermo