El lado humano de Froome
Por @pmpalermo
Chris Froome no es una máquina y lo demostró en el reciente Dauphiné Liberé, competencia en la que el mundo del ciclismo presenció por primera vez una derrota del nacido en Kenia en su mejor condición desde que es la estrella máxima de este deporte.
En el camino quedaron más de dos años de supremacía absoluta, período casi inigualable que comenzó con su explosión durante la Vuelta a España 2011 y que acabó en la carrera que sirve de ante sala al Tour hace unos días.
Con esto no queremos decir que el jefe de filas de Sky esté terminado, al contrario, ya que este baño de realidad le servirá para fortalecerse, más aún si consigue vencer en la Grande Bouclé tras una campaña que lejos está de la 2013, puesto que en estos meses le tocó sufrir una lesión de espalda, una infección en el pecho y una caída, escollos que modificaron un poco su preparación y, en consecuencia, los resultados.
Así, pasamos de la temporada previa en la que ganó Tour de Omán, Critérium Internacional, Tour de Romandía, Dauphiné y Tour de Francia (en Tirreno lo desbancó un pletórico Nibali rumbo al Giro) a este agridulce 2014 en el que “sólo” repitió en Omán y Romandía.
Los más pragmáticos dirán que no es correcta nuestra afirmación ya que en la Vuelta clasificó 2º en 2011 y 4º en 2012, pero todo aquel que esté mínimamente inmerso en el deporte pedal sabe que el británico tendría otros lauros en su currículum de no haber estado supeditado a Wiggins, puesto que sólo tuvo vía libre para luchar con Cobo cuando el ex pistard flaqueó, mientras que llegó cansado a la edición en la que Contador se lució en Fuente Dé.
Volviendo al presente, es cierto que su imagen actual no quedó bien parada, menos aún cuando su máximo rival se exhibió a sus anchas, humillándolo en las cimas francesas ante los incrédulos ojos del mundo, atónitos por la debacle de un atleta hasta ahora imbatible.
Lejos de analizar al de Pinto (ya lo hicimos aquí) es oportuno mencionar ciertos aspectos relativos a Froome que todavía lo ubican como uno de los máximos candidatos a la victoria en París, comenzando por el simple hecho de que es el campeón reinante y nunca debe subestimarse a quién logró tan difícil gesta.
El siguiente e ineludible hecho es que su rendimiento mermó las dos jornadas finales del Dauphiné debido a los golpes sufridos, porque si bien hasta ese momento el aguerrido Contador metía miedo, no había podido descolgar a su contrincante y cerca estuvo de ceder en el Col du Béal frente al capitán de los de negro.
Otro ítem que vale la pena reseñar es el equipo, porque no puede obviarse la fortaleza de los corredores de Sky, siempre mayoría en los puertos e imponiendo un ritmo fatal para los demás líderes, que llegaban a las cimas sin gregarios o incluso descolgados tras la brillante faena de López, Nieve, Porte, Thomas y Kiryienka.
Claro está que sólo en el seno de la escuadra inglesa conocen el alcance real de las lesiones de su capo, y por más que en el ciclismo se hable de “chapa y pintura”, cualquier desequilibrio en el organismo tiene consecuencias y posterior gasto de energía, por lo que de aquí a la partida del Tour, Froome debe centrarse en recuperar y nada más.
Lo positivo de estos incidentes es justamente que ocurrieron en el camino a Julio y aún así su forma es buena, por lo que además servirán de aprendizaje para un corredor que desde que alcanzó su status de estrella vivía en una burbuja, sin lesiones ni percances más allá de la Bilharzia, que tenía bajo control.
En definitiva se trata de resaltar dos aspectos: el primero, que pese al triunfo anímico de Contador, Froome sigue en carrera para repetir en el Tour, y el segundo, y aunque nunca es agradable tener problemas, es que el británico los experimentó y supo sobreponerse, conociendo la faceta menos agradable del ciclismo y revelando su lado más humano, para muchos irreconocible tras verlo brillar como un robot durante dos años.
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Pablo Martín Palermo
Excelente analisis Pablo, Lo leo muy imparcial, lleno de objetividad y conocimiento y sobre todo un gran respeto y admiracion por los dos atletas.
Gracias.
Gracias Luis.Esa es la idea.
Creo que ganará Contador, no porque crea que está más fuerte, creo que las primeras etapas de Dauphiné son las que debiéramos tener en cuenta y ahí Froome era el Froome de siempre.
Pero Contador no es el mismo del año pasado o de hace dos, la Vuelta de hace dos años la ganó ante un Purito que subía más que él, lo bueno de Contador es precisamente eso, que si está bien no le hace falta ser el más fuerte, porque ataca y ataca, cualquier momento de debilidad de Froome, basta con uno y en una etapa concreta, Contador la aprovechará.
Y psicológicamente Froome no me parece nada fuerte, en cuanto Contador se ponga de amarillo creo que el keniata se hunde, es más, ambos son los máximos favoritos y para mí únicos, pero no tengo nada claro que queden primero y segundo, uno ganará, el otro bien sea por derrumbe físico o psíquico, no hará ni podium.
Excelente aporte!coincido y mucho. Yo creo que si algo se le tuerce al keniata…adiós. De eso hablé en entradas previas. Alberto es un guerrero…atacará para arriba, para abajo o para atrás y eso le puede dar el Tour sin ser el más poderoso. Tendrá mejor equipo además y lo que pasó en la última de Dauphiné no se repetirá. Saludos!!
Pablo Martín, tengo otra percepción (no sobre la condición humana y la dolorosa experiencia del Keniata, que son el asunto de tu articulo, sí, en cambio, sobre la valoración del duelo Contador – Froome que veo en diferentes artículos):
No es posible efectuar un informado análisis más allá de las primeras etapas, en las que podemos estar seguros de la relativa igualdad de condiciones individualesde los dos. Y dado que no es posible valorar el grado de afectación de Froome a consecuencia de la caída (físico y psicológico), este es un apartado que, más que en una proyección, queda para la sola especulación.
El tiempo que perdió, los rivales que lo superaron, su dificultad para soportar incluso el paso de sus gregarios, todo ello nos dice que no estábamos ante Froome, frente el verdadero froome, ante el Froome de los primeros días, ese que de seguro enfrentarán en Leeds los touristas 2014.
En estas condiciones para hacer la valoración del duelo C – F, falto este ultimo, imprescindible referencia.
El ciclista Froome no es de mi gusto (ni su posición en la bicicleta, ni que pida glucosa fuera de la zona de alimentación, ni sus errores tácticos, ni sus problemas de salud saladados con autorización de la UCI), pero eso no interfiere con mi convicción de que la Dauphine, a pesar del resultado, no aclara nada diferente de que: 1.- contador también puede errar la estrategia —perdió por un error de valoración—. y 2.- en este duelo de pistoleros que será el Tour (tal como sucedió en el dauphine), no se puede descartar ni siquiera al cantinero.
Norwell.Coincido también contigo a excepción de algo: si debiéramos tener certezas de todo para poder escribir los artículos de opinión no existirían, menos las previas. Como puse en la nota, sólo los potenciómetros tienen la verdad y si todo fuera como ud dice, tampoco se podrían analizar las dos primera jornadas, porque no tenemos los números de sus computadoras. Coincido y lo puse que el Froome verdadero es el de las primeras jornadas, pero también que (dependiendo la gravedad de los golpes) un accidente insume un gasto energético y desequilibrios que no siempre se pueden sobre llevar. Por eso no sabemos tampoco si llegará a tope al Tour.Si así fuera, es innegable su poderío, pero a la vez, que sufre bajando y que Contador ataca hasta mientras duerme. Sobre Contador, no olvide que el equipo que llevará al Tour no tiene mucho que ver con el que vimos en Dauphiné. Con esos otros efectivos, no hubiera dejado ir a Talansky.Saludos y excelente debate!
Han mencionado ustedes algo que a mi ya me esta llamando ala atencion y retomo las palabras de norwellcr para traerlo a colacion: “En un duelo de pistoleros hay que tener presente tambien al cantinero”. Y lo retomo por que habra en el tour tambien unos terceros de muy buen nivel y sobre todo con equipos poderosos que nada tienen que envidiarle a SKY y Tinkof, por ejemplo Movistar, solo para mencionar uno, que tiene a un Alejandro Valverde en una excelente Forma. Estamos centrados todos en los dos top y hemos dejado un poquitico de lado a estos otros (Me incluyo).
Saludos.
Luis
Nosotros no los hemos dejado de lado. Hablamos de los dos pistoleros porque fueron los protagonistas del Dauphiné. Una vez que termine Suiza hablaremos de los demás, que tienen mucho que decir en el Tour. No se engañen amigos, pero hay calendarios que debemos respetar!
Tienes razon pablo, lo que pasa es que para esta epoca se va poniendo todo tan de pelicula que vamos perdiendo un poquito la paciencia y ya quisieramos hablar de muchos temas, pero la verdad es esa: Hay un calendario que debemos respetar.
Estupendo análisis Pablo, felicitaciones por esta ventana por tus siempre objetivos articulos, el camino siempre se encargara de recordarnos lo vulnerable que somos. Un saludo desde Venezuela.
Muchas gracias Wolfgang!!!