Quintana, el festejo de un país

Por @pmpalermo

Mañana no es un día cualquiera para Colombia, ya que en tierras cafeteras se celebra el aniversario de su Independencia, obtenida hace algo más de dos siglos y de la que poco o nada se hubiera hablado fuera de sus límites, de no ser por un embajador de lujo como Nairo Quintana.

Ante esta perspectiva es obligatorio entonces hacer mención, sobre todo por lo que puede pasar las próximas horas con el de Movistar, ya que tiene ante sí la oportunidad única de ser segundo del Tour de Francia, la carrera más importante del ciclismo mundial, y tan solo 21″ lo separan de la gesta.

Con Froome en amarillo indiscutidamente, sólo resta definir el podio, y de tener que apostar no dudaría en hacerlo  a favor del sudamericano, quién ha demostrado tener las mejores piernas a la hora de subir y mañana podrá refrendar sus cualidades en la exigente trepada final a Annecy-Semnoz.

Casualidad o causalidad de fechas, los ojos de un país revolucionado y en pleno festejo, se posarán sobre su hijo dilecto en busca de la hazaña, para la que tendrá que batir a Alberto Contador, quién no está mostrando su mejor versión y podría quedar fuera de los puestos de privilegio,  si además se tiene en cuenta que 47″ separan a los cuatro que siguen al maillot jaune.

Mañana, de repetir sus prestaciones previas, el hijo de Tunja, ciudad clave dentro de la historia de emancipación colombiana, será segundo, un logro por el que pocos apostaban a sus 23 años, en su primer Tour y trabajando para Valverde.

Es claro que el país sudamericano está frente a su generación dorada, y si bien mucho se habló de Urán y Betancur, el hecho de pelear mano a mano frente a los mejores y en la competencia más importante, transformó a Quintana en el nuevo estandarte del ciclismo que hicieron grande Parra, Herrera y compañía en los años 80.

Por eso mañana, el festejo es por partida doble y el premio puede ser gigante si el menudo pedalista boyacense revoluciona la Grande Bouclé y desbanca a Contador, casi como hace 200 años, cuando guiados por Simón Bolivar o Antonio Nariño, los colombianos cortaron los lazos con la España opresora y se declararon libres.

Pablo Martín Palermo