Alaphilippe entrenó dos horas luego de Dwars door Vlaanderen pensando en el domingo (¿y en Lefevere?)
Por @pmpalermo
Vaya uno a saber si las críticas constantes de Patrick Lefevere están alterando a sus pupilos, o si el entrenamiento estaba planificado. La cuestión es que Julian Alaphilippe extendió en dos horas su jornada una vez que acabó de correr en Dwars door Vlaanderen.
Esta situación no es nueva y no son pocos los ciclistas que añaden un par de horas a determinadas carreras para sumar fondo, pero a días de un objetivo es algo llamativo. El francés, que no ha estado a la altura de su mejor versión, estará el domingo en Tour de Flandes, y en dicho Monumento las piernas lidiarán con 273 kilómetros.
“Loulou” finalizó 29no en Dwars y tuvo algo de protagonismo, pero para él no fue suficiente. “No cometí errores pero cuando Benoot atacó no tuve piernas. Aún así me alegro de haber contribuido”, afirmó en meta, para luego exclamar: “Me voy, aún me quedan dos horas. El domingo va a ser más largo y, ciertamente, mucho más duro”, concluyó.
Panorama difícil para el WolfPack, con Van Aert, Van der Poel y Pogacar en la salida. Para peor, Alaphilippe está lejos de su mejor momento y ha sido hostigado por su patrón durante meses. Al menos, sus compañeros clasicómanos están en el mismo barco que el galo, que ya no está solo a la hora de recibir amonestaciones.
Curioso presente para la escuadra belga, históricamente famosa por sus velocistas y pedreros, ya que ahora sólo rinde Remco Evenepoel y su bloque de vueltas por etapas.
Pablo Palermo
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