El aviso de Meersman
Por @pmpalermo
Terminó la Challenge Mallorca con la disputa de la última de las cuatro Copas puestas en juego, el Trofeo Platja de Muro, en el que Gianni Meersman confirmó lo que venía anticipando los días previos y se quedó con la victoria.
Es que el belga de nombre italiano ya había clasificado cuarto en el Trofeo Palma y tercero en el Ses Salines dejando una muy buena impresión y demostrando además que aprendió la lección en 2013.
Esto quiere decir que además de beneficiarse de una progresión lógica, el de Omega corrigió algunos errores cometidos hace un año como fue tomar la salida en Tramuntana. En dicha ocasión no pudo concluir la carrera que además minó su energías debido a la dureza extrema para el debut estacional de un velocista, hecho que impidió una correcta recuperación y sólo le permitió acabar séptimo el evento que finalmente sí consiguió ayer.
Pero todo esto es un simple ejemplo de algo que se ha vuelto una constante en la trayectoria de Meersman, que a los 28 años y en plena madurez, sólo echa en falta un gran triunfo para integrar el grupo de sprinters de prestigio.
Dicho sea de paso, es válido resaltar que el de Tielt no es un embalador tradicional de esos con físicos enormes y trenos a su disposición; no, nuestro protagonista es mucho más versátil, pasa bien la media montaña y eso lo convierte en un peligroso rival para cualquiera si está en forma, por lo que bien podría ser candidato en la nueva versión de la Milán San Remo.
A modo de muestra, 2013 fue testigo de una gran progresión por parte del ex Lotto y Francaise des Jeux, que concluyó 30 veces en el Top 10 en 83 días de competición, en los que levantó los brazos en cinco oportunidades.
Merrie, como lo apodan en su círculo más cercano, obtuvo dos parciales en Volta a Catalunya, otros tantos en Tour de Romandía, rozó el éxito en tres etapas del Dauphiné pero consiguió la malla verde, fue sub campeón nacional, se hizo con el prólogo en Tour de L´Ain y redondeó su temporada con cuatro top 5 en la Vuelta a España.
Es claro que Meersman no es flor de un día ni una aparición actual, pero sí que comenzó a concretar las chances que se le presentan y por caso, mejoró también lo hecho en 2012, cuando “apenas” ganó una jornada en Volta ao Algarve y otra en París Niza, además de estar cerca en Romandía, Tour de Valonia y nuevamente, en la gran ronda española.
Por otra parte, el suceso del belga es una muestra de su talento y confianza en sí mismo, ya que cuando llegó a la escuadra muchos dudaban sobre sus opciones debido a la gran cantidad de figuras presentes, algo que no inmutó al veloz corredor, quién se forjó oportunidades por su cuenta e incrementó su valor dentro de la estructura.
Así quedó a la vista en Mallorca, donde sus compañeros entregaron todo y él no defraudó, batiendo en la llegada a dos hombres rápidos como Ventoso y Swift tras ser lanzado por una futura súper estrella como Michal Kwiatkowski, ganador el día anterior en el mencionado Trofeo Serra deTramuntana.
Con todo esto en vista, es válido afirmar que Meersman ya es una de las tres puntas de lanza de Omega en lo que a llegadas masivas refiere por detrás, claro, de Cavendish y Boonen, pero con galones para disputar allí donde no estén sus famosos colegas, por lo que no es casual que no compartan muchas pruebas.
De hecho, es el único pedalista confirmado por Lefevere para Classic Sud Ardèche donde fue sexto en 2013 y tal vez ocurra lo mismo con la montañosa París Niza, donde tendrá muchas opciones gracias a su capacidad para las trepadas, como ya evidenció hace dos temporadas al vencer allí el parcial con llegada a Rodez tras superar cinco puertos de 2º y 3º categoría o con el podio alcanzado unos meses más tarde en la exigente Clásica de San Sebastián.
En concreto, se trata de resaltar el crecimiento experimentado por Gianni Meersman desde su arribo a Omega y el aviso que envió hoy al ganar ya en su tercer día de competición de 2014, dejando una gran impresión que, de confirmarse, lo posiciona muy alto de cara a estrenarse finalmente en una de las grandes o incluso en un Monumento.
Pablo Martín Palermo
